Durante la
última década la industria nuclear civil fue recuperando algo del
terreno que había perdido a raíz de los desastres de Isla de Tres Millas
y, sobre todo, Chernobyl. El mejor aliado fue el debate sobre el
calentamiento global y el lobby nuclear no desperdició la oportunidad,
insistiendo en las casi cero emisiones de gases invernadero y buscando
que se olvide el problema de la seguridad y de los desperdicios
radiactivos.
Ahora el desastre en la central de Fukushima a raíz del terremoto y
del tsunami de la semana pasada reabrió el debate. Las explosiones, la
fusión parcial del núcleo y las emisiones
controladasde material radioactivo podrían haber sido suficientes para recordar a todo mundo que las centrales nucleares constituyen una forma peligrosa de generar energía. Paradójicamente, los pro-nucleares argumentan que la catástrofe en Fukushima es una prueba de que las instalaciones de la industria nuclear civil son sólidas y confiables.
El argumento que se esgrime es que los reactores en Fukushima
estuvieron sometidos a un castigo brutal: un terremoto de 8.9 grados y,
poco después, un tsunami de grandes proporciones. Eso revela lo robusto y
bien diseñado de estos artefactos. De aquí se desliza la conclusión de
que la energía nuclear es segura, confiable y económica.
En los últimos 15 años, la compañía japonesa TEPCO, dueña y operadora
de la planta de Fukushima, se vio envuelta en una larga historia de
mentiras y manipulación de la información sobre la seguridad en sus
plantas nucleares. En algunos casos varios de sus funcionarios
incurrieron en responsabilidades penales. Su credibilidad es muy pobre y
su conducta en esta catástrofe no hace sino empeorar esta situación.
Según TEPCO, las barras de control se insertaron correctamente
durante el terremoto o en los minutos que le siguieron en los tres
reactores en funcionamiento. Sin embargo, el calor residual en el núcleo
del reactor es demasiado intenso y durante varios días es necesario
seguir inyectando refrigerante para ir reduciendo la temperatura. Si no
se mantiene el flujo de agua, las barras de combustible nuclear pueden
fundirse, aún cuando la reacción del reactor haya sido controlada.
El tsunami incapacitó el sistema principal de bombeo de agua para
reducir la temperatura. El mecanismo de respaldo entró en
funcionamiento, pero no por mucho tiempo pues también resultó afectado
por el tsunami. Los operadores de la planta recurrieron a sistemas de
bombeo que funcionan con baterías y con generadores móviles, pero eso
tampoco duró y poco después el refrigerante al interior de la vasija del
reactor se fue evaporando. Para el martes los ingenieros en Fukushima
habían optado por el último recurso, inundando el contenedor primario y
la vasija de los tres reactores con agua de mar. Este recurso significa
que el reactor tendrá que ser desmantelado cuando se extinga la reacción
y la temperatura permita iniciar los trabajos en el reactor. La
acumulación de hidrógeno provocó las tres explosiones que destruyeron
los edificios de los reactores dañados. Los voceros de TEPCO insisten en
que el contendor primario y la vasija de los reactores no fueron
dañadas por estas explosiones.
Ya se ha producido una fusión parcial del núcleo en por lo
menos dos de los reactores del complejo de Fukushima. En un caso las
barras de combustible estuvieron expuestas por un periodo de dos horas y
media. Su temperatura se mantuvo en niveles altísimos, precipitando la
fusión parcial del núcleo. Por otra parte, los movimientos de
temperatura y presión al interior de la vasija de dos reactores también
son indicio de una fractura en las paredes del contenedor primario.
Finalmente, las lecturas de material radioactivo en el interior y en las
proximidades de la central nuclear son otro potente indicador de que la
integridad del núcleo del reactor en dos de las unidades de Fukushima
está gravemente vulnerada.
En caso de una liberación violenta de material radioactivo a la atmósfera, la dirección del viento es un factor importante. Si fracasan los esfuerzos por evitar la fusión de los núcleos de los tres reactores en Fukushima, se puede liberar a la atmósfera una gran cantidad de material radiactivo. Una nube radioactiva inyectada a baja altitud por una emisión de los reactores dañados representa un grave riesgo. Si se presentan vientos en dirección sur-oeste, la zona metropolitana de Tokio-Yokohama se vería amenazada.
Los tres reactores afectados en Fukushima son de agua hirviente (BWR). Dos de ellos son General Electric, casi idénticos a las dos unidades de la planta de Laguna Verde. Habrá que observar en las próximas horas: si los esfuerzos por mantener el flujo de refrigerante fracasan, estaremos frente a una catástrofe inédita. Ni los más ardientes pro-nucleares podrán manipular los hechos y presentar todo esto como una historia de éxito. Hoy, las mentiras del lobby nuclear han quedado a cielo abierto, como el contenedor primario de los tres reactores en Fukushima.
En caso de una liberación violenta de material radioactivo a la atmósfera, la dirección del viento es un factor importante. Si fracasan los esfuerzos por evitar la fusión de los núcleos de los tres reactores en Fukushima, se puede liberar a la atmósfera una gran cantidad de material radiactivo. Una nube radioactiva inyectada a baja altitud por una emisión de los reactores dañados representa un grave riesgo. Si se presentan vientos en dirección sur-oeste, la zona metropolitana de Tokio-Yokohama se vería amenazada.
Los tres reactores afectados en Fukushima son de agua hirviente (BWR). Dos de ellos son General Electric, casi idénticos a las dos unidades de la planta de Laguna Verde. Habrá que observar en las próximas horas: si los esfuerzos por mantener el flujo de refrigerante fracasan, estaremos frente a una catástrofe inédita. Ni los más ardientes pro-nucleares podrán manipular los hechos y presentar todo esto como una historia de éxito. Hoy, las mentiras del lobby nuclear han quedado a cielo abierto, como el contenedor primario de los tres reactores en Fukushima.
Fuente, vìa :
http://www.jornada.unam.mx/2011/03/16/index.php?section=opinion&article=032a1eco
No hay comentarios:
Publicar un comentario