La Alameda presentará hoy una denuncia penal contra
la empresa Nuestra Huella SA, dueña de varias granjas agrícolas, por el
grave estado de salud en que se encuentra un chico de 7 años, internado
en terapia intensiva por manipular durante meses agrotóxicos mientras
realizaba trabajos considerados ilegales, cumpliendo contratos ilegales a
cargo de la mencionada empresa, según los denunciantes. El chico, E.F.,
padece cáncer. En 2008 su caso, junto con el de muchos otros chicos y
sus familias, fue revelado en una filmación –y sus imágenes difundidas
por Página/12– donde se demostraba la explotación en establecimientos de
Nuestra Huella en Zárate, Pilar y Capilla del Señor. En la denuncia,
además se sostiene que E.F. no recibió ningún tipo de tratamiento
oncológico cuando ya se le había detectado la enfermedad por negativa de
la empresa.
E.F. trabajaba recogiendo huevos en un gallinero en el
establecimiento La Mimosa III, en Capilla del Señor, donde se realizaban
fumigaciones para combatir a las moscas. Ahora está internado en la
sala de terapia intensiva del Centro Gallego, ubicado en la Avenida
Belgrano 2199, de la Ciudad de Buenos Aires, porque los médicos le
diagnosticaron cáncer. La denuncia, que será presentada hoy ante la
Justicia penal, pide que se investigue ante la sospecha de que la
enfermedad fue “consecuencia de la manipulación de agroquímicos, sin las
medidas de seguridad exigidas”. El texto agrega que los venenos “se
encontraban al alcance de los menores y algunos como el menor E. los
preparaban”.
Su historia, como la de otros niños, se conoció a partir de una
cámara oculta de La Alameda, que tomó imágenes dentro de los
establecimientos avícolas, el 10 de agosto de 2008, cuando en todo el
país se festejaba el Día del Niño, imágenes que fueron difundidas por
este diario al día siguiente. El video muestra la rutina de los chicos
que debían recoger los huevos del gallinero todos los días combatiendo
las moscas y el olor a excremento. En la película, Ezequiel relataba que
ayudaba a su padre a “preparar” los venenos que la empresa Nuestra
Huella SA utilizaba en su actividad industrial en las granjas avícolas
que son de su propiedad.
Según los denunciantes, la madre de Ezequiel sufrió reproches por
parte del encargado de la Granja Mimosa III, “Ceferino Vieira (quien
manifestó) ‘tienes que elegir entre cuidar a tu hijo o cuidar el
trabajo’ (sic)”. Y hay sospechas de que a pesar del delicado estado de
salud del niño la empresa “les negó a los padres las horas necesarias
para que puedan asistir a su hijo con tratamiento oncológico”.
Por otra parte, los apartados 3 y 4 del artículo 32 y Concordantes
de la Ley de Riesgos del Trabajo, de acuerdo con la denuncia, han sido
“sistemáticamente incumplidos” por la empresa Nuestra Huella y sus
integrantes, sin que se haya registrado actuación de la Justicia penal.
Además, señala que los denunciantes del estado de E. fueron víctimas del
delito de trata de personas y sufrieron represalias por parte de la
empresa avícola. Frente a estos hechos, se solicitaron medidas
precautorias, pero la Justicia aún no las ha otorgado.
En ese sentido, el texto de la denuncia señala que pese a la
requisitoria del fiscal Colombo para llevar adelante una exhaustiva
inspección y relevamiento en las granjas de la empresa denunciada, y de
las condiciones de trabajo, y su posterior pedido de citar a indagatoria
a los responsables de dichos delitos, “a la fecha sólo contamos con la
visitas del personal de la Policía Federal”. Todavía esperan respuestas.
El abogado Rodolfo Cleto García, quien formuló la denuncia contra
los directivos de Nuestra Huella SA, también solicitó el llamado a
indagatoria de las personas físicas que integran la empresa denunciada y
de aquellas que “han participado dolosamente en la comisión de delitos
en perjuicio de las víctimas de trata de personas respecto de los
trabajadores de dicha empresa”.
Fuente Vìa :
http://www.pagina12.com.ar/diario/sociedad/3-156496-2010-11-08.html
No hay comentarios:
Publicar un comentario