Chile : Las demandas sociales vistas por los ricos...Loreto Soto

Defensa a la Economía Social de Mercado, críticas a las manifestaciones sociales y voces abogando por cambios sustanciales, fueron algunas de las posturas que se expresaron en la Enade 2011, cita empresarial que tenía como objetivo debatir si las demandas puestas sobre la mesa por la ciudadanía deben o no concretarse. 

Un particular prisma presentó la última versión de la Enade, el encuentro empresarial más importante del país, donde se intentó analizar las razones y los efectos de las movilizaciones sociales desde la perspectiva de la elite.  De hecho, el slogan de la cita ponía en tela de juicio la validez del proverbio Vox Populi, Vox Dei, cuestionando si lo que reclama el clamor popular es lo que, efectivamente, debe llevarse a cabo.
En esa línea, el Presidente Sebastián Piñera, recalcó que el Gobierno no puede dar respuesta a todas las demandas puestas sobre la mesa, en especial por el movimiento estudiantil, y dejar de lado a las “otras mayorías que no se manifiestan”.
“Nada más fácil para un Mandatario y para una administración que decir que sí a todas las peticiones. Lo difícil es saber escuchar con atención y humildad la verdadera voz del pueblo y después encausarla con sabiduría y con prudencia. No siempre los que hablan más fuerte o los que exigen con mayor vehemencia sus derechos representan la voz del pueblo. También hay que saben escuchar a las mayorías silenciosas que muchas veces no pueden hacer oír su voz, pero que sí se expresan con su voto cuando eligen democráticamente a sus autoridades. Fueron ellos los que nos eligieron junto con nuestro programa”, dijo el Jefe de Estado.
En tanto, el presidente de la Confederación de la Producción y el Comercio (CPC), Lorenzo Constans, atribuyó la efervescencia social a la poca participación que tienen algunas personas de las bondades del crecimiento económico. Sin embargo, respaldó la vigencia del sistema e hizo un llamado a las autoridades a no tomar decisiones irresponsables.
“Aunque nuestra economía esté bien, algunos grupos de nuestra sociedad se encuentran postergados y se sienten frustrados ¿La razón? No han tenido acceso a los beneficios propios del crecimiento o carecen de la posibilidad de ofrecerles un mejor futuro a sus hijos. Seguramente hay mucho de esto en el malestar que se ve reflejado en las calles. Frente a ello, lo que corresponde es escuchar, pero actuar con responsabilidad. Debemos evitar que el apuro por solucionar los problemas de la gente se transforme en respuestas populistas y cortoplacistas que pueden producir déficit fiscal y deuda pública, que ya sabemos a dónde ha llevado a otros países”, sostuvo Constans.
Por su parte, el empresario y abogado ligado a los Legionarios de Cristo, Fernando Barros, cuestionó la legitimidad de los movimientos sociales y aseguró que las inequidades son algo intrínseco en nuestras sociedad y que, tal como lo había atisbado el Presidente Piñera unos meses atrás, nada es gratis en esta vida.
“Aquí hay una protesta contra el pecado original, contra la sentencia tan dura desde tiempos inmemoriales de que hay que ganarse el pan con el sudor de la frente. Hay reconocer que unos tienen que sudar más y las marraquetas son más chicas, pero desgraciadamente todos tenemos que ganarnos el pan. Esta generación, antes de empezar a sufrir los endeudamientos y de intentar salir adelante, ya se siente derrotada”, sentenció Barros.
En la otra vereda, el abogado y analista político, Jorge Navarrete, afirmó que es necesario escuchar las voces de movimientos sociales que, según su opinión, están anhelando cambios sustanciales que puedan emparejar la cancha en una sociedad que no ofrece las mismas oportunidades a todos sus miembros.
“Muchos compatriotas todos los días constatan que tanto el mercado como la política, está lleno de caminos cortos, de subsidios y de atajos reservados para unos pocos y en desmedro de muchos. Desde esta perspectiva, no es raro que el tema de la educación se haya instalado con tanto vigor y por tanto tiempo porque es un instrumento de movilidad social. A mi entender, lo que quieren los ciudadanos no es simplemente una reforma en un sentido u otro, sino que el cambio en las reglas del juego. Esa es la razón por la cual esta demanda se ha acompañado además de otro tipo de reivindicaciones como la modificación global al sistema político o al pacto tributario”, comentó Navarrete.
Según el investigador de la Fundación Sol, Alexander Paez, el hecho de que la propia elite empresarial se preocupe de debatir estos temas es un síntoma de la relevancia de las protestas sociales y afirmó que mientras algunos ya han reconocido que esto se trata de una crisis del sistema, otros lo trivializan y lo trasladan al ámbito de lograr una mejor imagen corporativa.
“Estamos viendo signos muy peligrosos de malestar social que están dados por 40 años de implementación de un sistema que recién se está aplicando en Europa. A través de los universitarios nos dimos cuenta que este modelo no da para más, tal como lo advierten algunas personas en la elite, los intelectuales y la gente en la calle. En los hogares el endeudamiento excesivo, los bajos salarios, situaciones laborales de extrema precariedad constituyen una juguera de elementos que se acumulan y que son la base material en la que se sostiene este modelo. Eso es lo que se está haciendo agua”, afirmó.
Y mientras las autoridades que participaron en el encuentro defendieron a capa y espada el modelo de Economía Social de Mercado, ya existen algunas voces que abogan por reformas más profundas que podrían partir con una modificación del régimen tributario, como una forma de mejorar la tan cuestionada inequidad que azota a nuestro país.

Vìa :
http://radio.uchile.cl/noticias/131597/