1. ¿Cómo recibir al presidente ilegítimo Felipe Calderón –represor y
asesino, junto a Fox y Ulises Ruiz- en Oaxaca si ha demostrado con
creces que es enemigo de los indígenas, campesinos, profesores y
ciudadanos de ese estado? ¿Piensa acaso que con el gobernador Gabino
Cué, o Fué, como le dicen, todo es borrón y cuenta nueva y que se puede
pasear campantemente por el Zócalo como si fuera un turista más? ¿Pueden
olvidar la APP0, la Sección 22 del magisterio y demás trabajadores la
represión y desalojo del 14 de junio de 2006 ordenada por Ulises y Fox,
la represión contra los universitarios, la ocupación del Zócalo por el
ejército, la bárbara represión del 25 de noviembre y los
encarcelamientos, torturas y asesinatos contra luchadores sociales y
periodistas? Las protestas reprimidas de ayer martes 15 son la
continuidad de aquellas batallas de 2006 y no pararán sino que hasta que
se haga justicia, es decir, resuelvan los problemas planteados desde
entonces y
castiguen a los asesinos y represores de 2006.
2. ¿Qué gobernante, gobernador o presidente de la República, se
atrevería a ser represor, ladrón, asesino, tramposo, si en todo México
existiera la conciencia y la dignidad de los oaxaqueños rebeldes? (Digo
rebeldes, luchadores sociales, porque también hay una minoría de
oaxaqueños racistas, explotadores y acomodaticios) Y este es el problema
básico que resuelve todos los problemas del país: ¡que la gente, los de
abajo, los trabajadores, no permitan que los gobernantes hagan lo que
les dé la gana!. Pero dado que a la mayoría de la población la
manipulan, la engañan, acepta cualquier limosna o promesa, los
gobernantes actúan con libertad para hacer lo que les venga en gana. Y
ves a la gente desesperada preguntando cómo y cuándo se podrán resolver
los problemas del país, como si fuera una adivinanza. No se dan cuenta
de que todo está en sus manos, de que el pueblo lo puede todo cuando
lucha, protesta, sale a las calles y se enfrenta.
3. ¿Por qué entonces los oaxaqueños no han resuelto sus problemas si
son muy luchadores? Porque todos los gobiernos, empresarios, medios de
información, fuerzas represivas del país, se unen contra ellos; y
nosotros -los trabajadores en el país- somos tan cobardes y carentes de
conciencia que no nos unimos para apoyarlos; siempre los dejamos solos
para que el poder los aplaste y asesine. En mayo y junio de 2006
construyeron unos quinientos campamentos de plástico en por lo menos 25
manzanas del centro donde se pasaron días y noches los profesores y
demás trabajadores para obligar al gobierno a resolver los problemas de
alumnos (becas, desayunos, uniformes, libros), padres de familia
(empleos), profesores (varias demandas), campesinos (tierras y créditos)
Los gobiernos de Fox (panista) y los priístas -sin resolver nada- se
unieron para desalojar el plantón. Fox y los dirigentes nacionales del
PRI habían negociado el total apoyo al gobernador Ulises Ruiz.
4. El 14 de junio a las 2 de la mañana comenzó el desalojo con gases
lacrimógenos, destrucción de campamentos y persecución de mujeres y
niños; desalojo del edificio de la Sección 22 y de la Casa-hotel del
Maestro. Yo –como periodista- dormía en el dispensario médico del
auditorio cuando llegaron los militares que se pusieron a desalojar
cuartos y romper puertas. Al retirarse, todos nos unimos a las seis de
la mañana (el día anterior me había publicado un artículo el diario
Noticias) para recuperar la plaza desde todas las bocacalles donde con
bombas lacrimógenas arrojadas por ellos y desde helicópteros, trataban
de dispersarnos. Ante la gran presión de varios cientos de profesores
que combativamente rodeaban el Zócalo, a los ocho quizá recibieron
órdenes de retirarse a la carrera, pero los profesores pudieron tomar de
rehenes a tres policías. Fue entonces cuando iniciamos una marcha
alrededor del centro histórico de Oaxaca para reagrupar a la gente.
5. El 25 de noviembre, cuando ya Calderón ejercía sus funciones de
presidente, a pesar que le faltaban seis días para tomar el cargo, se
desató otra gran represión en Oaxaca. Como periodista marché varios
kilómetros, desde la casa del gobernador hasta el Zócalo. La
manifestación era gigantesca y venían en ella unos 700 mil profesores y
trabajadores. Cuando llegamos a dos cuadras del Zócalo fuimos rodeando
la plaza dejando contingentes en cada calle de entrada; acordonaría al
Zócalo ocupado por el ejército y la policía. Después de dejar más de 10
contingentes los últimos llegamos a la altura de la calle que va a la
iglesia de Santo Domingo. La posición de los militares era de reto, pues
pretendían desalojar a los profesores partiendo del Zócalo. Todo estaba
bien, pero los chavos, los más jóvenes, no se dejaron intimidad y se
prepararon para defender la barricada. Todo terminó en represión
ordenada por Calderón desde México y por Ulises Ruiz desde
Oaxaca.
6. Ese día y los siguientes comenzó y se amplió la “cacería de
brujas”. Muchos dirigentes fueron recogidos en sus casas y en las calles
y llevados presos. Los periodistas, aunque tuviéramos colgada una
identificación, éramos mal vistos por la policía. Yo viajé al DF porque
de allí había salido dos días antes –con un compañero de la CNTE- que
llevaba una camioneta de medicinas que sea habían reunido en el
campamento de la Plaza Tolsá, frente a la Escuela de Ingenieros. Al
mismo Flavio Sosa lo apresaron cuando se preparada para cumplir un cita
en la secretaría de Gobernación. ¿De dónde entonces los oaxaqueños
pueden adoptar una actitud de olvido si han sido víctimas de la brutal
represión policiaca y del ejército y quedan pendientes mil un problemas
urgentes de solucionar? En los hechos fue Calderón el que tomó el mando
en agosto de 2006 porque Fox se había hecho irresponsable de los que
sucedía. Por eso los oaxaqueños están seguros que Calderón
ordenó la represión en la Universidad y el 25 de noviembre.
7. Oaxaca es el ombligo de la lucha social en México y sus
experiencias deben recogerse. Sus estados hermanos en múltiples batallas
son Guerrero, Chiapas, Michoacán, Morelos, Hidalgo, Puebla, el DF y el
Estado de México. En el Norte están estados con diferentes
características, pero también están contribuyendo para la transformación
social. Pero por otro lado también hay estados de la República, tan
pacíficos, aunque también tan pobres, tan silenciosos, que parecen no
existir. Jamás se habla de luchas sociales en Nayarit, Colima, Campeche,
Yucatán, Quintana Roo, Querétaro, Guanajuato, Tlaxcala, Baja Sur,
Aguascalientes, Coahuila y Sonora; doce estados donde parece que no pasa
nada porque la clase dominante (empresarios, gobierno, clero) ha
impuesto durante un siglo o más, su dominio total. Habría que estudiar
bien sus historias, las relaciones de clases sociales que han existido,
los sistemas de dominación y control, pero sobre todo si se puede contar
con esos
estados para las luchas revolucionarias.
La foto no proviene del enlace original:
http://www.oaxacaenpiedelucha.info/
http://www.oaxacaenpiedelucha.info/
No hay comentarios:
Publicar un comentario