¿Podemos imaginar una ciudad de Dos Hermanas con pleno empleo? Una ciudad en la que todos sus habitantes en edad de trabajar estuvieran trabajando, mediante un contrato, unas oposiciones o regentando algún pequeño comercio. Una ciudad en la que todas las familias residentes tuvieran la posibilidad, no solo de ganarse la vida con su trabajo si no, además, de hacer planes, de tener una previsión de futuro para sus hijas e hijos. Cabe señalar que Dos Hermanas es uno de los 12 mucipios andaluces con más de 100.000 habitantes, tiene más población que Jaén, está en el nivel poblacional de Cádiz y tiene casi los mismos habitantes que Huelva. Es decir, sería una situación idílica para cerca de 140.000 personas
Sin duda, en una ciudad así no faltaría la polaridad política, como la que existe hoy, salvando las históricas circunstancias que hoy nos acompañan cada día.
¿Qué ocurriría si en esa ciudad de Dos Hermanas, con pleno empleo y con las diferencias políticas normales, un militante del principal partido de la oposición en la alcaldía, el Partido Popular, que hace las funciones de asesor de su grupo municipal en el ayuntamiento, dice en su muro de facebook ESTO:
Fuera de toda duda, saltarían todas las alarmas. Aunque todo el mundo estuviera trabajando (y no necesitara de inmediato un empleo, o cambiar el que tiene) las palabras de este señor no pueden dejar indiferente a nadie:
Está vinculando algo que él llama “parasitismo en las empresas” a los trabajadores afiliados a sindicatos, partidos de izquierda o antisistema, y a sus simpatizantes.
Vincula esa misma ideología a la idea de que los trabajadores que la profesan tratan de “boicotear la empresa…” “…para que tenga pérdidas…”
También transmite la idea de que no contar con trabajadores sindicalistas o de izquierdas hará mejorar la “producción” de la empresa.
Además, en esa Dos Hermanas con pleno empleo, si los empresarios le hicieran caso, habría provocado un altísimo índice de paro, y, desde luego, les habría engañado, porque no hubieran conseguido, de ninguna manera, aumentar la producción de sus empresas.
Aunque parece incalificable, la cantidad de adjetivos que podrían definir la actitud de este “político” podría llegar a ser una multitud, y ninguno sería para alabar su nota.
Sería escandaloso.
Pero es más, es que la publicación de este escrito podría ser considerada un delito, al pregonar y tratar de provocar una discriminación laboral por razones ideológicas, algo prohibido en nuestra legislación:
Arts. 510 y 511 del código penal.
Art. 18 del código penal.
La realidad de Dos Hermanas dista mucho de ser la que hemos imaginado hasta ahora. Tiene registrados cerca de 24.000 personas demandan empleo, dentro de una provincia, la de Sevilla, en la que la última EPA cifra el desempleo en más de un 33%. Es decir, un desastre.
Es en este ámbito en el que un militante del partido del gobierno, que airea y alardea de su colaboración con el grupo municipal del PP, publica lo que se ha mencionado.
Una Dos Hermanas que, acogida al Decreto Ley de Medidas Extraordinarias y Urgentes para la lucha contra la Exclusión Social, ha convocado la concesión de contratos de 3 meses, para empleos de baja cualificación, y, debido al poco número de contratos ofrecidos y el gran número de demandantes, se han formado colas ante las puertas del ayuntamiento que se han durado toda la noche. Tres noches seguidas.
¿Cuántos de ellos serán militantes o simpatizantes de sindicatos, partidos de izquierda o de grupos antisistema?
Todos los resultados de la actitud de este señor en la utópica Dos Hermanas del pleno empleo son aplicables también en este lúgubre escenario, pero, en este caso, la situación real se convierte en un enorme altavoz para aquellas consecuencias. En Dos Hermanas, dolorosamente, no es infrecuente encontrar dramas derivados de la situación de desempleo, de personas que han perdido su empleo, o mejor dicho, a las que les han quitado su empleo, y estas personas y sus familias se ven abocadas a modificar sustancialmente su dinámica vital, o a perder su casa, o a afrontar deudas de por vida. En definitiva, a empobrecerse.
¿Y los empresarios? Dos Hermanas es una ciudad de pequeños empresarios. Muchos de ellos ya han visto como han tenido que cerrar sus negocios. ¿Qué pueden pensar los empresarios de semejantes barbaridades? Si, como ocurre a día de hoy, muchos empresarios luchan casi con desespero por sacar adelante sus comercios o pequeñas tiendas ¿qué pensarán de lo escrito por este hombre, militante activo dentro del partido político del actual gobierno central? Desde luego, si alguno de ellos tuviera, debido a esa desesperación, la tentación de hacerle caso, las secuelas y los daños que sufrieran podrían achacárselas, con mucha nitidez, a personas e instituciones concretas.
El despropósito ha sido gigantesco. Desde que Fran Parejo, concejal de IU, denunció en su blog la publicación de esta mezquina nota, se ha multiplicado la difusión de la misma, hasta llegar a redes nacionales de noticias como Menéame, que han hecho que la difusión se agigante y las visitas al blog de este concejal se multipliquen casi por mil. Mucha gente se ha visto atacada por estos pocos renglones.
Desde luego, nosotr@s nos hemos sentido directamente aludid@s en los patéticos párrafos de este señor. Es conocida nuestra actividad en lo que llamamos Punto de Información de Vivienda y Encuentro (PIVE), donde ayudamos y apoyamos a familias afectadas por problemas con la vivienda. Personas que, desde hace meses, se acompañan para negociar con los bancos unas condiciones que regularicen su situación. Situación cerca del drama en muchos casos. Casos en los que el trabajo es fundamental para que las cosas empiecen a rodar con una mínima normalidad.
Y desde el paro tenemos que ver como, con total impunidad, desde un partido que pretende gobernar en Dos Hermanas, alguno de nuestros propios vecinos, les dice a los empresarios que no nos contraten porque correría peligro la producción de su empresa… ¿Qué será lo siguiente? ¿Alguien da más?
Vía:
http://www.tercerainformacion.es/spip.php?article55906
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