En los últimos cuatro años la crisis está modificando los hábitos de consumo y de vida de los españoles de forma tan grave y profunda que son clara mayoría los que han visto empeorar sus condiciones de vida; los que se han visto obligados a modificar, adaptar o incluso eliminar, sus necesidades más básicas o los que han tenido que recurrir a sus ahorros o incluso a pedir dinero a familiares y amigos para hacer frente a los gastos más corrientes.
Así se desprende del último Observatorio de la Cadena Ser, en el que se certifican situaciones como estas. Por ejemplo, para un 67%, es decir para dos de cada tres, la crisis ha empeorado la situación económica de su hogar. Un porcentaje parecido, el 63%, se ha visto obligado a recurrir a sus ahorros para afrontar gastos corrientes.
El 60% reconoce haber variado la cesta de la compra dando prioridad a productos más baratos, del mismo modo, más del 70% procura hacer sus compras en establecimientos con descuentos u ofertas. Es preciso recordar que existe una técnica comercial practicada por no pocos establecimientos y que consiste en ofertar un producto por debajo incluso de su precio de coste, de manera que sirva de poderoso reclamo para los clientes que, a buen seguro, terminarán por comprar otros productos no tan rebajados en el mismo establecimiento. Esta técnica es conocida como “isla de pérdidas en un mar de beneficios”.
Otros recortes que la crisis ha impuesto a los ciudadanos españoles son por ejemplo los relacionados con el ocio. Más del 45% de los ciudadanos han dejado de viajar, más del 70% salen menos a bares y restaurantes y casi el 60% ha dejado de ir a cines, teatros y conciertos.
Además, y con relación a la reciente subida del IVA, impuesta por el Gobierno de Mariano Rajoy, casi tres de cada cuatro ciudadanos tiene asumido que tendrá que dejar de hacer algún que otro gasto para dedicar parte de su presupuesto a hacer frente a la subida del impuesto. De entre este porcentaje de ciudadanos (73%) que tendrán que reducir adicionalmente sus gastos por la subida del IVA, el 30% recortará sus gastos en ocio, el 25% reducirá el uso del coche, el 21% estrechará más aún sus pautas de consumo o el 18% en servicios de telefonía o suministros del hogar como luz, agua, gas, calefacción. En porcentajes menores, otros gastos que los ciudadanos prevén reducir son ropa, calzado, bares y restauración, peluquería, alimentación y bebidas, viajes, tabaco, libros, seguros o regalos.
En cuestiones generales, los ciudadanos se muestran también muy decididos, más del 89% se muestra insatisfecho con el funcionamiento de la economía en España, más del 70% se muestra insatisfecho con el funcionamiento actual de la democracia y más del 72% lo está con el funcionamiento del estado del bienestar.
Con respecto de las instituciones el ciudadano tiene una percepción también muy clara. Más del 82% no confía en el Gobierno de España, más del 73% no confía en el Gobierno de sus respectivas Comunidades Autónomas y más del 71% no confía en las instituciones europeas. Este último dato contrasta en cierta medida con el 41% de ciudadanos que ven positivo para España la pertenencia a la Unión Europea.
En la valoración que los ciudadanos hacen de los principales líderes políticos, cabe destacar que Rajoy tiene una nota de 0 sobre 10 para más del 50% de los encuestados.
Respecto de la intención de voto, el PP ve reducido el 44,6% que le dio la victoria en las últimas elecciones hasta el 31,1%. Por su parte el PSOE pierde cuatro puntos y se queda en un 24,8%. IU pasa del 6,9% a un 11,3% y UPyD de un 4,7% a un 13%. Es significativo el aumento que se produce del voto en blanco, pasando de un 1,4% a un 7,8%
Vía,fuente:
http://www.tercerainformacion.es/spip.php?article41596
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