Italia: si no es ahora... ¿cuándo? Cynthia Rodríguez

(apro).- El invierno aún no se ha ido pero Italia ya está que arde. Desde que en octubre pasado se dio a conocer que el primer ministro Silvio Berlusconi había llamado personalmente a la comisaría de Milán para que liberaran a la joven marroquí, Karima El Mahrough, hoy conocida como Ruby Corazones, bajo pretexto que era la sobrina de Hosni Mubarak, los reclamos y el descontento social crecen cada día.

De hecho, el miércoles 9 los jueces de la Procuraduría de Milán anunciaron que Berlusconi será juzgado bajo la figura de “rito inmediato” por los delitos de concusión (abuso de poder) y favorecimiento de la prostitución de menores, delito que también enfrentan la consejera regional Nicole Minetti; el conductor de Televisión, Emilio Fede; y el productor artístico Lele Mora, quienes participaban en la selección de las muchachas que asisten a las fiestas del mandatario.

Un grupo de 28 mujeres son actualmente investigadas por la Procuraduría de Milán. Entre ellas se encuentran Ruby y la brasileña Iris Berardi, quienes presuntamente acudieron a las fiestas y recibieron dinero cuando todavía eran menores de edad.

De acuerdo con el expediente 55781/2010 de la Procuraduría de Milán --del cual Apro tiene una copia--, en las “fiestas salvajes” del presidente del Consejo de Ministros, éste reparte a sus invitadas regalos y hasta sobres con 500, 2 mil o hasta 5 mil euros. Y son estas fiestas las que tienen indignada a una gran parte de la población, la cual ha visto castigada su calidad de vida en los últimos años.

Según datos del, el Instituto Italiano de Estadística (ISTAT),  la desocupación en el último trimestre del 2010 alcanzó casi 30%. La población juvenil resulta la más castigada: 10% arriba de la media europea. El sur del país es el más afectado. En esta región el sueldo promedio no supera los 800 euros mensuales.

“Para mí, que paso días enteros repartiendo por todos lados mi currículum con la esperanza de encontrar un trabajo y con el conocimiento que no puedo aspirar a más de mil 200 euros al mes, todo este asunto del ‘bunga-bunga’ y las escort, me indigna”, comenta Alessandra Russo, una joven con título en Relaciones Exteriores.

“Pero la situación está tan difícil –continúa-- que a veces te juro que me dan ganas de ir a tocar a Arcore (residencia de Berlusconi) y decir ‘yo también quiero estar en las fiestas’, pues si con una noche te ganas lo que te puedes ganar con un mes o dos de trabajo, pues entonces entiendes muchas cosas”, señala Russo, quien llegó a Milán proveniente de Nápoles porque asegura que en su ciudad ya perdió las esperanzas de encontrar un trabajo.

La dice joven que esta situación la ha motivado a participar en dos manifestaciones contra Berlusconi. “Creo que si el país estuviera mejor, la población no tendría problema en saber si hace fiestas, si invita a quien quiera invitar, pero es un insulto saber que sólo quien se acuesta con él puede aspirar a tener una vida mejor. Desgraciadamente también me doy cuenta que es una práctica que muchas aceptan e incluso muchas desean entrar en ese círculo.”

Así, además de enfrentar a los jueces, el gobernante enfrenta un descontento social que cada vez es más evidente.

Diversas asociaciones y grupos civiles han organizado en lo que va del año decenas de manifestaciones contra Berlusconi, pues al mismo tiempo que han salido a la luz pública los detalles de las fiestas del político –quien a 14 jovencitas les paga departamento, les ofrece salario en su empresa Mediaset o las coloca en la administración pública-- la situación laboral no mejora.

De hecho, el fin de semana antepasado se llevaron a cabo en esta ciudad dos de las manifestaciones más importantes que se han hecho en contra del primer ministro desde que empezó el año. El sábado 5 participaron miles de personas, entre las que se encontraban figuras como Umberto Eco y Roberto Saviano. Los manifestantes pidieron la dimisión de Berlusconi por considerar que daña a la democracia del país. Al día siguiente el movimiento Pueblo Violeta se manifestó a las puertas de Villa San Martino, la casa de Berlusconi en Arcore.

Sin embargo, la movilización más fuerte será este domingo 13, cuando miles de mujeres de toda Italia participen en las manifestaciones que se organizan desde hace 15 días en al menos 10 de las ciudades más importantes del país.

Con el lema de “Si no es ahora ¿cuándo?”, las mujeres han decidido organizarse para protestar contra esta cultura de las llamadas escort, damas de compañía o prostitutas de lujo.

“Esta Italia no es un país para mujeres, sólo que la mitad del país está formada por ellas: mujeres, muchachas y niñas, cuya mirada sobre el mundo y la vida, diferente de la de los hombres, muchachos y niños, es el fundamento de un país civil. Esta mirada es una necesidad a la que nosotros, mujeres y hombres, no podemos renunciar. Solamente quien está fuera de la historia puede llegar a pensar que las mujeres corresponden al imaginario de cerdos que no son capaces de hacer el amor ni de confrontarse ni de trabajar al lado y a la par de las mujeres”, dice el spot de la invitación a la manifestación contra Berlusconi programada para este domingo 13.

Continúa: “Hombres, por favor, ¿pueden decir que no quieren estar en un país que parece una fea película de los 50? Y mujeres, salgamos todas juntas de nuestras casas y mostremos nuestras caras desnudas… Las esperamos el 13 para decir Italia es un país para mujeres!”

Para Carla Corso, exprostituta y activista italiana, quien fundó el Comité de los Derechos Civiles de las prostitutas en Roma en 1982, dice a Apro que “el problema no es nunca quien se vende, sino quien compra. El amor es gratis, se puede hacer con quien se quiera y cuantas veces se quiera. También venderse es lícito, pero es la adquisición de la sociedad entera lo que da asco”.

“Nosotros luchábamos contra el mundo, queríamos romper la hipocresía. Estas muchachitas (las asistentes a las fiestas de Berlusconi) no están en contra, funcionan y sirven al sistema”, señala Corso.

Los días para que Berlusconi regrese a los tribunales parecen estar  contados.

Fuente, vìa :

http://proceso.com.mx/rv/modHome/detalleExclusiva/88356

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