Chile : El Presidente Piñera y las promesas rotas . Rodrigo Alarcón López. El Presidente Sebastián Piñera propuso 7 “grandes desafíos” para que “los chilenos juzguen por los resultados”: empleo, crecimiento, pobreza, seguridad, salud, educación y democracia. Mientras el Gobierno asegura que ha cumplido con más del 70% de sus promesas y la oposición habla de un 14%, parlamentarios y distintos actores pasan revista a un año de administración Piñera. Los compromisos, más allá de los porcentajes.

Frase fecunda durante la campaña, el 21 de mayo y

todo el período del Presidente Sebastián Piñera: “Crearemos un millón de empleos, es decir, 200 mil al año”. Para eso, el mandatario anunció capacitaciones, un nuevo trato a las pymes, modificaciones al seguro de desempleo y una “cultura del emprendimiento”, entre otros temas.
Pero hay un detalle: “Nuestra estimación es que se crearon 160 mil empleos menos de lo que dice la cifra oficial que han publicado algunos diarios. Se ha publicado ‘récord en la creación de empleos’, 488 mil empleos, pero se crearon 160 mil empleos menos. Hicimos los análisis estadísticos detallados”, asegura Óscar Landerretche, director de la Escuela de Postgrado del Instituto de Asuntos Públicos (INAP) de la Universidad de Chile. Según el académico, las cifras que el Gobierno ha celebrado -y seguramente recalcará este 21 de mayo- están distorsionadas por un cambio de metodología en el Instituto Nacional de Estadísticas (INE). “El problema es que este es uno de los compromisos centrales del Gobierno, tiene consecuencias, no es solo un temita estadístico”, recalca. Del mismo modo, las auspiciosas cifras de crecimiento tienen “una baja base de comparación”: los meses posteriores al terremoto.
En entrevista con Semáforo de Radio Universidad de Chile, Landerretche dijo además que “poco más de la mitad de estos empleos no son asalariados, sino de cuenta propia, trabajadores no remunerados, de servicio. Así que tenemos dudas de la calidad del empleo que se está generando. Hay que dar tiempo para ver qué sucede, pero hasta aquí no podemos asegurar que el empleo es de buena calidad”.
Pobreza
La meta es “erradicar la extrema pobreza antes de 2014, la pobreza antes de 2018 y terminar con las desigualdades excesivas”, según el último discurso de Piñera. Para eso había dos proyectos estrella: el Ingreso Ético Familiar (IEF) y el Ministerio de Desarrollo Social (MDS), que sustituye al Ministerio de Planificación y aún se tramita en el Parlamento.

Enrique Accorsi

No obstante, el diputado Enrique Accorsi (PPD), integrante de la comisión de Superación de la Pobreza de la Cámara,  es crítico con estas medidas: “El famoso IEF ahora es colectivo: tienes que juntar a toda la familia, que junta todos los ingresos, pusieron un tope y las familias que tienen tal ingreso ya no son del tema pobreza. Pero estamos hablando de un ingreso ético en los sueldos de las personas, entonces no es lo que se prometió”, señala. Asimismo, reclama que en “la comisión de Pobreza hasta la fecha no hemos recibido ningún proyecto. Hemos presentado temas como la discriminación a las mujeres en la AFP y una reforma tributaria, pero no hemos tenido ninguna recepción por parte del Ejecutivo”.
Por su parte, el director ejecutivo de la Fundación Superación de la Pobreza, Mauricio Rosenbluth, aunque considera “no imposible” cumplir esa meta, es más preciso: “La superación estadística de la pobreza es lo más fácil, superarla por un aumento sustancial en los ingresos de las personas y suponer que ya lo resolvimos. Pero la pobreza no es un problema solo de ingreso, también de oportunidades, desarrollo, de capacidad de las personas para funcionar socioeconómicamente, desarrollar sus proyectos de forma autónoma, sin una dependencia permanente de las políticas asistenciales del Estado. Ese tipo de superación de pobreza, más complejo, no se puede resolver a la brevedad”, sentencia.
Seguridad
La seguridad ciudadana ha sido uno de los caballitos de batalla de la administración Piñera desde la misma campaña. El 21 de mayo pasado se anunció la creación del Ministerio de Interior y Seguridad Pública y el aumento en la dotación de Carabineros y detectives, entre otras medidas.
Pero en realidad, muchas de las políticas impulsadas por el Ejecutivo se iniciaron en el gobierno anterior, según señala Hugo Frühling, director del Centro de Estudios en Seguridad Ciudadana de la Universidad de Chile: “En buena parte de los casos en que las propuestas implican reformas legislativas, los proyectos se han presentado. En algunos casos hay avances, como en el uso de brazaletes para el cumplimiento de medidas cautelares. En otros anuncios, como la creación de fiscalías especiales, el avance ha sido muy menor”, evalúa.
Educación
“La batalla por el desarrollo y contra la pobreza, la vamos a ganar o perder en la sala de clases”, fue una de las frases del Presidente en su discurso. Por eso anunció hasta 10 medidas, que incluían la Agencia y Superintendencia de Calidad de la educación, reformas en las becas para magíster y doctorados, Liceos de Excelencia, incentivos a las pedagogías y cambios al Simce, entre otras.

Cristián Bellei

Sin embargo, el académico del Centro de Investigación Avanzada en Educación (CIAE) de la Universidad de Chile, Cristián Bellei, enfatiza que en el curso del año el Gobierno ha asumido más compromisos y que “los temas más relevantes todavía están pendientes. Por ejemplo, en el tema de los profesores, aunque el Gobierno ha hecho muchas cosas, no ha hecho la más importante, que también está pendiente desde el gobierno anterior: la creación de una carrera profesional docente, un abordaje más sistémico y no puntual”.
Asimismo, el especialista señala que el Ejecutivo ha usado “una retórica exagerada” para anunciar las medidas: “El manejo comunicacional ha sido desafortunado. Cuando el ministro Lavín habló de una gran revolución en educación, en realidad se refería a dos o tres cuestiones bastante puntuales y marginales. De hecho, han sido revertidas, como la creación de los semáforos del Simce o el aumento en horas de lenguaje y matemáticas contra las de ciencias sociales y arte”, explica.
Salud
El Presidente Piñera anunció una serie de medidas para prevenir mejor las enfermedades, garantizar atención oportuna y de calidad y aumentar la infraestructura hospitalaria. Entre ellas, terminar con las listas de espera AUGE en dos años era uno de los objetivos estrella.

Mariano Ruiz-Esquide

Sin embargo, para el senador integrante de la comisión de Salud, Mariano Ruiz-Esquide (DC), ha habido escaso avance: “No se han terminado las listas de espera, la reconstrucción de los hospitales, las falencias en los recursos que el sector público requiere, el ordenamiento en el sistema de licencias médicas”, ejemplifica. “En general, medido no en lo que yo creo que debe hacerse, sino en lo que ellos dijeron que se debe hacer, estamos atrasados”, sentencia.
En tanto, su par en la Cámara de Diputados, Enrique Accorsi (PPD), considera que las listas de espera disminuyeron porque “se pasaron a los privados, pero tenemos que definir si vamos a seguir haciendo compras a privados o vamos a fortalecer debidamente el sistema público”. El legislador valora las nuevas normativas contra el tabaco y la comida chatarra, pero afirma “las cosas que se prometieron tienen un avance como de un 30% o 40%. En reconstrucción hospitalaria, vacunas, refuerzo a la atención primaria. En el mismo posnatal estamos recién empezando, igual que en el 7% de los jubilados. Y la gente dice que uno de los problemas más serios que tiene es la salud”.
Democracia
Ocho fueron los ámbitos en que el Presidente Piñera hizo anuncios para hacer “una democracia más vital, cercana, participativa y transparente”. Entre ellos destacaban dos iniciativas que siguen entrampadas en la discusión parlamentaria: inscripción automática y voto voluntario y sufragio de los chilenos en el extranjero.
“Me toca viajar a distintas partes del mundo y la gente pregunta cómo Chile lleva 20 años de retorno a la democracia y todavía no legisla sobre ese tema”, dice Andrés Solimano, director de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso Chile). En esa línea, el experto considera que “Chile debiera abrirse a otros mecanismos, como el plebiscito. Hay una camisa de fuerza, todo tiene que pasar por el Parlamento, pero hay temas en que la lógica parlamentaria no es necesariamente lo que le convien

e al país. Hay que abrir el espectro de consulta ciudadana”. ¿Qué responsabilidad le cabe al Gobierno? “Puede trabajar con las urgencias. El Gobierno tiene mucho que ver, es un país presidencialista. Pero es necesario ir más allá y ver si estructuralmente la democracia requiere cambios fundamentales”, concluye Solimano.
Este sábado, cuando Piñera enfrente al Congreso Pleno por segunda vez desde que asumió, hará nuevos anuncios en temas como educación superior y medio ambiente. No obstante, deberá recordar además el espíritu original del ceremonioso 21 de mayo: dar cuenta pública de lo realizado en el año. Él tiene la palabra.

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