Tiene que ver con la recuperación
de territorios históricos, que las familias mapuches del sur de
Argentina y Chile han emprendido desde diciembre de 2014 en general, y
que se agudizaron en enero y febrero de 2015, sobre todo en la zona de
Villa La Angostura, Neuquén. Ya hubo enfrentamientos durante el verano,
entre patotas de los empresarios “dueños de las tierras”. La fiscalía ya
emitió la orden de desalojo, pero el gobierno provincial no la ejecutó,
por evitar que el conflicto se visibilice en el marco del mundial de
motocross que se desarrolló en la villa.
Por ANRed. /Fotos: Indymedia Pueblos Originarios.
Unos 30 efectivos de la policía
provincial neuquina se sumaron al cuerpo de seguridad en Villa La
Angostura. Son parte de un grupo mayor de cien efectivos, que
concurrieron al pequeño poblado cordillerano como parte de un operativo
de seguridad especial, por el campeonato mundial de motocross que se
desarrolló en el lugar hace una semana atrás.
Represión y desalojo al Pueblo Mapuche
Pero, la presencia de esta treintena de
oficiales de policía tiene que ver con “garantizar la seguridad y el
control” en el marco de un conflicto de propiedad de tierras desatado
desde diciembre del año pasado, que tuvo expresiones en todo el país y
en el vecino Chile, pero que encontró en la villa, un epicentro cargado
de violencia y enfrentamientos.
Comenzó cuando las familias Paichil
Antriau, de la comunidad mapuche de la zona de siete lagos, recuperó los
terrenos denominados “la obra”, en la localidad de Villa La Angostura,
que pertenecerían al empresario Carlos Cristian Furlón.
Durante todo enero y febrero de este
año, las familias mapuches denunciaron las amenazas y ataques violentos
que sufrieron por parte de patotas enviadas por los empresarios en
cuestión o por policías, que por acción u omisión, participaron de la
represión al pueblo mapuche, en la capital de los jardines.
Esta misma situación de desalojo y
represión es sufrida por otros pueblos originarios de nuestro país y los
vecinos de América Latina. Tal es el caso de los Qom o los Wichis, que
en Formosa y Chaco son reprimidos y expulsados sistemáticamente por las
fuerzas de seguridad; o en Chile, donde las comunidades mapuches del
sur, llevan adelante una larga batalla por recuperar y sostener sus
territorios ancestrales.
Abuso de autoridad y persecución por parte de la justicia
En una carta dirigida al fiscal que
resulte designado para el caso de desalojo de terrenos ocupados por las
familias del Lonko, Ernesto Antriao y Werken, Mario Railaf, la comunidad
mapuche, Paichil Antreao, de la localidad neuquina de Villa La
Angostura, denunciaron el abuso de autoridad por parte de la fiscalía
que ordenó la intervención ilegal.
“Ernesto Antriao y Mario Railaf, Lonko y
Werken respectivamente de la Comunidad Paichil Antreao, venimos a
presentar denuncia por la presunta comisión del delito de abuso de
autoridad (artículo 248 del código penal) por parte de funcionarios de
este Ministerio Público Fiscal”, expusieron.
“Hemos tomado conocimiento por los
medios de comunicación de esta localidad (Villa La Angostura) acerca de
la existencia de una “orden de desalojo” que habría sido emitida por
algún alto funcionario de este Ministerio Público Fiscal, contra la
Comunidad Paichil Antreao y sus miembros, la que explícita o
implícitamente incluye los domicilios de éstos últimos”, dijeron en la
misiva.
Y explicaron: “en caso de ser cierta la
noticia y de existir dicha orden, la misma configuraría claramente el
delito de abuso de autoridad previsto y reprimido por el artículo 248
del código penal, por cuanto ni el código procesal ni la ley del
Ministerio Público Fiscal autorizan la realización de ese tipo de
órdenes, puesto que en el actual sistema procesal (al igual que en el
anterior) las decisiones de uso de la fuerza estatal sólo pueden ser
autorizadas por un juez”. Y agregaron: “el fiscal, como claramente lo
establecen el código y la ley 2893, no puede realizar medidas de
coerción y mucho menos autorizar el ingreso a domicilios, máxime
tratándose de territorios comunitarios indígenas protegidos por expresas
normas de derechos humanos (artículos 13, 14 y 16 del Convenio 169 de
la O.I.T. y Ley 26.160)”.
En relación a lo explicado
anteriormente, la comunidad expresó que “en consecuencia, una orden de
ese tipo dirigida a la Policía, sólo puede realizarse en abuso de las
funciones y utilizando una prevalencia jerárquica que únicamente debe
ejercerse dentro de los términos de la competencia dada por ley”.
“Es por ello que solicitamos que se
inicie legajo de investigación por el delito de abuso de autoridad y se
secuestre la “orden de desalojo” en caso de que ella exista como
principal prueba de la existencia del delito”, concluyeron.
Juicios contra luchadores y luchadoras mapuches
Esta persecución legal, tiene otro
capítulo en los procesamientos de tres miembros de las comunidades
mapuches de Winkul Newen y Wiñoy Folil.
Tal como lo denunciaron en un comunicado
de prensa, el 13 de abril tendrá lugar una nueva audiencia por el
procesamiento de integrantes de las comunidades Winkul Newen y Wiñoy
Folil. La demanda, imputa a Relmu Ñanku por tentativa de homicidio.
Según explicaron, “esta acusación, sin sustentos jurídicos, apunta a criminalizar una mujer líder y luchadora, y a dos referentes de comunidades que, el gobierno provincial (del MPN) intenta invisibilizar, como estrategia para el avance de una política extractivista en todo el territorio”.
Según explicaron, “esta acusación, sin sustentos jurídicos, apunta a criminalizar una mujer líder y luchadora, y a dos referentes de comunidades que, el gobierno provincial (del MPN) intenta invisibilizar, como estrategia para el avance de una política extractivista en todo el territorio”.
“Detrás de esto, existe un estado que
diseña estrategias dirigidas a desplazar del territorio ancestral al
pueblo mapuche, dando continuidad al histórico avasallamiento y
exterminio del que ha sido víctima, pero al que siempre se ha puesto
resistencia”, denunciaron.
En el mismo comunicado, familiares y
otros miembros de las comunidades implicadas en estas denuncias penales,
invitan al próximo 13 de abril a la audiencia que tendrá lugar en el
Juzgado de Zapala, provincia de Neuquén.
Más policías para garantizar la propiedad privada
Así, en Villa La Angostura se configuró
un relato ya habitual, que derivó en una secuencia bien conocida por los
mapuches: la represión estatal en garantía de la propiedad privada y no
de su derecho legítimo sobre territorios de ocupación ancestral, cosa
que también legitima la constitución nacional.
Sea con grupos para-policiales, patotas
armadas o las propias policías locales y provinciales, los pueblos
originarios se han enfrentado a esta dinámica cruel históricamente. Pero
esta cuestión, se ha agudizado desde que en diciembre del último año,
las comunidades mapuches de Chiles y Argentina, declararan la intención
de recuperar la posesión de tierras históricamente ocupadas por estos
pueblos originarios.
Estos 30 efectivos que llegaron por el
mundial de motocross a la pequeña villa, representan la garantía de las
intenciones de la Ley y el Estado capitalista y patriarcal, y las de sus
agentes operadores. Con una orden judicial, denunciada como ilegítima, y
el refuerzo de las fuerzas de seguridad, ya apostado en el lugar para
intervenir, el mensaje del gobierno provincial, dirigido por el partido
de derecha, el Movimiento Popular Neuquino (MPN), no deja lugar a dudas:
todos los mecanismos con los que cuenta el Estado, para la defensa de
la propiedad privada, serán puestos a disposición de los terratenientes y
empresarios inmobiliarios que vieron vulnerado su “derecho capitalista”
de comprar y retener.
http://www.anred.org/spip.php?article9617
vía:
http://kaosenlared.net/argentina-refuerzan-presencia-policial-para-garantizar-el-desalojo-de-familias-mapuches/
No hay comentarios:
Publicar un comentario