Como en los cuentos, en Stefan v/s Kramer -estrenada ayer y batiendo récords de pre venta- hay buenos y malos. Como en la vida, los malos son los políticos. Como quién sabe por qué, Rafa Araneda versión Kramer está del lado de los malulos.
-¿Nunca pensaste que Rafael Araneda se interpretara a sí mismo?

Kramer, al lado de los otros dos directores de la película -Sebastián Freund y Lalo Prieto- se pone en modalidad de voz Araneda:
-Es que a mi me gusta imitar a ese personaje. No tanto en la parte de animación de programa de televisión si no en la conversa, en generar una instancia. Entonces esa cercanía es más importante a la hora de hacer cine, también porque tenís a los personajes en momentos íntimos. No los veís todo el rato como hablan para la tele. Como pasa con Longton, que aparece como un amigo fiel y te dicen “¿Por qué escogiste ese personaje si hay otros que están más en boga? ¿O pueden ser más relevantes como algún político? Pero se ganan el cariño realmente los personajes porque el cine te da esa oportunidad.
-O sea yo terminé queriendo al Negro Piñera. Primera vez que me pasa.

-Jajaja. Eso es bonito. Fueron las primeras señales al ver los cortes de la película: decir “Ohhh, que bacán esto”. Lograr ese cariño.
-Pero el Rafa Araneda es detestable. ¿No se picó?

-No. Para nada. De hecho yo lo llamé si ningún pudor hace mucho tiempo atrás porque quería que la Marcela actuara en alguna escena y le dije: “Mira, tú vai de villano, tu personaje es antagónico, es la fuerza contraria que se necesita para la tensión dramática, erís mi vecino, me proponís un discurso, te desentendís, estai coludido con Piñera y al final te redime por la familia y los niños. “Haz lo que querai”, me dijo. “Yo me cago de la risa”. Así que él se lo ha tomado así y te dai ciertas licencias con la gente más cercana.
-¿Qué onda Piñera? ¿Pensaron en invitarlo a la premiere en algún momento?

-Estaba invitado. Estuvo a punto de ir
-¿Y?

-Y bueno. Su agenda. Los presidentes, po…- dice Sebastián.
Kramer piensa en voz alta:
-Habría cambiado todo.
-Se olvida el interés por el vestido de Javiera Acevedo.

-Jajaja. Claro. Pero todo pasa por algo. La verdad todo estaba súper alineado ese día, había buena vibra. Hasta los programas de farándula más duros no había ni una pregunta mala onda…
-¿Qué tiene que tener alguien para ser interesante de imitar?

-Yo creo que todas las personas son interesantes.
-¿Sí?

-Todo ser humano tiene virtudes y defectos, tiene una manera de ver la vida, tiene un historial. A lo mejor uno se puede identificar más con uno. a lo mejor te reís más si te interpreto quince segundos a alexis porque te pongo una cara y  otros necesitan más desarrollo…
-Pero, por ejemplo, leí que le tenis echado el ojo a Lagos Weber y a Carlos Larraín. ¿Qué tienen ellos? ¿Por qué no Larroulet?

-Porque yo los encuentro divertidos. Es interesante el personaje en sí. Carlos Larraín y su postura, las cosas que dice. Siempre tiene una frasecita que cita algún hecho histórico, tiene cosas entretenidas. Y Lagos Weber es bacán porque se demuestra tal cual es, como que uno dice: “Chuta, este gallo está hablando como cualquier persona” y no se esconde tanto en hablar con cuidado en el momento de referirse a los temas. Y por otro lado tiene la cara, los labios, los anteojos, la mochila…
-¿Qué tiene Piñera que lo hace tan chistoso? Porque a uno le da risa sin que sea imitado…

-Los errores que comete igual son divertidos. En cada lugar que va se manda un chascarro. Como que está tan pendiente de no meter las patas que las mete más.
-Se arriesga solo citando cosas históricas o literarias.

Kramer se pone en modalidad Piñera:
-Claro: “Así como Violeta Parra, asi como los grandes” y uno dice: “Cuidadoooo. cuidadooo” Y los datos, y las frases tipo que no puede dejar. Porque cada vez que le preguntan por la imitación, dice: “Yo soy un gran admirador de Kramer. Y tengo tres cosas que decirle a Stefan: la primera, que todavía me duele la guata de tanto reírme en el festival interncional de la canción de Viña del Mar, la segunda, que mi hija todavia no me perdona”. O sea yo la última vez que lo escuché dije: “Ohhh la cagó”.
-¿Será gran admirador tuyo?

-No sé. No lo conozco personalmente. No lo cacho en su intimidad como a otros que los conocís en una sala detrás de un canal.
-Igual se picaron cuando hiciste lo de la Bachelet y Bielsa.

-Tal vez por el protagonismo que ella tuvo. Ya había sido Presidenta y se trató como si todavía lo fuera.
Sebastián, como para salvarlo de la pregunta incómoda, dice:
-Lo bueno es que está dándose harto vuelta la tortilla. ¿Viste las declaraciones de Hinzpeter?
-Es que es cool que te imite kramer. Como que es mala onda ser mala onda.

-Pero igual hay que hacerle un homenaje a Zalaquett. O sea vino a la premiere, dio la cara, contó su experiencia de vida y quedó totalmente bien parado.
-Pero ¿qué vas a hacer? Si te imita Kramer estás cagado.

-Te podís quedar callado-, dice Lalo.
-Es mejor unirse con el enemigo.

-Bueno, pero eso demuestra que están en la capacidad de reírse de si mismos y no ponerse graves, y entender que esto es ficción y no realidad- dice Sebastián.
-Es tramposa la diferencia ficción/realidad. Uno dice “es ficción” y se lava las manos.

-Pero si es ficción- de nuevo, Sebastián.
-Uno arma un mundo de ficción que le interesa armar por ciertas razones.

Es el turno de Kramer:
-Está bien. Uno a partir de la realidad logra la ficción con hechos concretos que suceden y que todos identifican.
-¿Y cuál es la función del humor?. O de tu humor, más bien.

-A mi me carga pontificar acerca de eso. Decir: “el humor es el encargado de”. Pero refleja realidad, refleja lo que vivimos, y lo que no se puede decir en otras cosas…También es entretener, es hacer reír y creo que hay una línea bien delgada entre que la gente se pueda incomodar o no incomodar..
-¿Te gusta incomodar?

-No es mi bandera de lucha. La idea es que nos podamos reír de cualquiera, no más. Olvídate como yo molesto a estos cabros sin ningún problema. Los agarro pa`l hueveo firme. Y si alguien se molesta decimos: “Bueno, no tiene nuestro humor”. Para la Teletón, ponte tú, imité al negro y estaba ahí. Jamás pensé que alguien se podría incomodar pero llevaba actuando dos minutos y se cortaba con un hilo el ambiente porque en un momento se generó una tensión y te decían: “Yo no lo disfruté. Me puse incómodo”. Y lo bonito del humor es que después yo narro en vivo que me encontré con un compadre en la calle que me dice: “Oye que estuviste fome en la Teletón”, entonces creo que tú hacís humor hasta de las cosas que te dicen, de las cosas que te critican.
-Es lo que hiciste con Jordi que en la película sí muestra las fotos que amenazan a tu matrimonio.

-¡Y eso estaba escrito antes!
-¿En serio? ¿Y lo invitaron a la premiere?

-No se ha mostrado muy a gusto como para estar, aunque creo que si ve la película le va a gustar. Uno ve algo más global, no hay algo tan específico.
-No te ha pasado que piensas: “chucha, se me pasó la mano”.

-O sea, si alguien abiertamente dice que le molesta a nivel familiar y que su novio, y que no sé qué, y que la botella o qué se yo es: “Oye, si te molesta tanto yo no tengo problema en que dos cositas no estén”. Por eso te digo que yo siento que yo no estoy para representar a los que dicen: “Noo, el humor es el encargado de transgredir y si Kramer transa con eso yo no lo veo más”. Bueno: no me veai más po, compadre. Si yo soy yo.


Vía,fuente:
http://www.theclinic.cl/2012/08/03/pinera-esta-tan-pendiente-de-no-meter-las-patas-que-las-mete-mas/