Son peones frutícolas, son veintidós, viajaron desde General Roca,
Río Negro, están en Plaza de Mayo, están en huelga de hambre, están aquí
en nombre de todos los peones rurales del sur del país (”porque a todos
nos pasa lo mismo”, cuenta Carlos) reclamando a la Presidenta lo que ni
la Superintendencia rionegrense, ni la junta médica de su seguro de
salud, ni esa ART, les reconoció: que por cargar, subir, bajar,
desplazar pesos -que son inmensos cajones de frutas en casos, que es
sentarse al tractor nueve horas al día en otros- se están quedando
inválidos. Carlos y otros tres reparten desesperados volantes
desesperados: “Hemos llegado desde la Patagonia para denunciar la
infamia de las Aseguradoras de Riesgos del Trabajo ART, que en
complicidad con patrones y la Superintendencia de Riesgos del Trabajo
SRT, nos condenan a la indigencia, dándonos un trato discriminatorio,
injusto, tomando la vida de un obrero en menos valor que la de un animal
de trabajo”.
Así se presentan.
Así están.
Carlos -podría haber sido otro cualquiera- señala su rodilla, muestra
una operación, ahora señala su columna, no hay cortes. Una caída con un
recolector lleno de frutas le costó las dos partes, pero la Aseguradora
aceptó sólo operarlo de la rodilla. “Tengo una hernia en la espalda
-aclara- y me dijeron que no corresponde a la Aseguradora operarla”. Le
intervinieron la rodilla, entonces, y le dieron el alta. Según esta ART,
su incapacidad tras la operación es de un 15,7%, lo que le permitiría
seguir trabajando. La Junta Médica de la Aseguradora la bajó al 13,3%.
Carlos se sentía incapaz de seguir cargando esos cajones escaleras
arriba y abajo, que es lo que hace. La espalda le grita. “El porcentaje
de incapacidad que me da un médico de un hospital público es muchísimo
más alto, casi el cincuenta”, relata. Pero cuando le cuenta esto a sus
patrones, la respuesta es la misma siempre: “Trabajá”.
La salud de los explotados
Los 21 restantes pueden contar el mismo caso diferente. Todos están
accidentados o intervenidos quirúrgicamente y asignados a un nivel de
incapacidad que no corresponde con lesiones y dolores. No corresponde,
incluso, con lo que otros médicos diagnostican. El porcentaje a todos
asignados es el mismo mínimo. Que una rodilla, que una espalda, que el
brazo… diferentes son los casos y misma la respuesta. Las aseguradoras
Prevención, QBE, PROFU, La Caja y Asociar se desentienden del tema. “El
sindicato burócrata que se supone debe defendernos, no se atreve a dar
la cara, nuestra marcha desafía a esos cobardes que luchan con nuestras
afiliaciones para enriquecerse y engordar a costa de miles de obreros
desamparados”, sigue el volante. Además, estos días denunciaron al
sindicato UATRE -encabezado por el dirigente duhaldista Gerónimo
Venegas- por amenazas, al que parece no alcanzarle esa inacción.
Una larga batalla
La UATRE había estado a la cabeza en los piquetes masivos en las
rutas de Neuquén y Río Negro en agosto de 2008, reclamando un aumento
del 20%, según estipula la ley 18883 que caratula a la región como
“desfavorable”. Ahora, lo desfavorable es el trabajo en sí. Reclaman, al
menos, que se les asignen tareas más livianas. No sólo no pueden seguir
al ritmo en que venían; de seguir así, entre caídas, cargas y
desplazamientos, sus cuerpos seguirán en desgaste. Denuncian: “Nos
transforman en hombres inválidos, incapacitados de poder seguir
manteniendo a nuestras familias”. El primer paso sería establecer un
porcentaje de invalidez objetivo, no a manos de las Aseguradoras que
dependen de las propias empresas para quienes trabajan; luego, que se
les asignen tareas de acuerdo ello.
En Plaza de Mayo
El lunes 23 de mayo llegaron desde la Patagonia los veintidós peones
frutícolas que pudieron costear el pasaje. Esos días cortaron un tramo
de la 9 de julio, y algunas cámaras los mostraron. Siguen durmiendo a la
intemperie frente a La Rosada, sin carpas, con frío, manteniendo una
huelga de hambre y, hasta el 30, una “seca”. Carlos: “Tuvimos que volver
a ingerir líquidos porque era imposible de sostener. Hoy una compañera
tuvo que ser internada por todos estos problemas… Todo esta llegando a
un punto en que no podremos resistir mucho más”.
Las manzanas, peras, duraznos y ciruelas que comemos, que comés, que
se comen en todo el país y se exportan al mundo son las que éstos 22 y
otros tantos, en el sur, cosechan, levantan, cargan, desplazan, embalan.
Quienes los explotan son empresas privadas dueñas o arrendatarias de
esas inmensas chacras sureñas. Se preguntan, estos veintidós, porqué
están a miles y miles de kilómetros de su hogar: “Vinimos a que el
gobierno nos escuche. Tenemos papeles, no es que vinimos a hablar nada
más, traemos papeles con sellos de la Aseguradora, y otros de hospitales
públicos. Lo que estamos reclamando es la verdad, no es otra cosa”,
explica Carlos. Y es la verdad.
Sin respuesta
Hasta ahora, en estos nueve días tan sólo les han aceptado una “nota”
en Casa de Gobierno, sin respuesta. La viceministra de Trabajo, Noemí
Rial, los recibió junto al responsable de la Superitendencia de Riesgos
de Trabajo, Juan González Gaviola: les explicaron dónde encauzar sus
reclamos, cómo destrabar las prestaciones médicas y reclamar por los
porcentajes de discapacidad. Carlos interpreta: “Todavía nada concreto”.
Por lo demás, se declaran dispuestos a hablar con quien se les acerque.
En el mientras tanto, su desesperación es concreta: están en huelga
de hambre. “No nos vamos a ir de acá hasta que podamos aguantar, que es
realmente difícil. No pensamos que nos iba a llevar tanto tiempo que el
gobierno nos escuchara”, se lamenta. Estos veintidós, así como están, no
tienen cómo irse. “Por eso queremos que el gobierno nos escuche, porque
por más que queramos levantar la huelga, hoy no podemos porque no
tenemos con qué sacar los boletos de vuelta”.
Para comunicarse:
Guillermo Saavedra 0294 - 15 35018
Para acercarse:
Plaza de Mayo
Para acercarles:
Frazadas.
Vìa :
http://lavaca.org/notas/manzanas-por-frazadas-huelga-de-hambre-de-trabajadores-rurales-en-plaza-de-mayo/
http://lavaca.org/notas/manzanas-por-frazadas-huelga-de-hambre-de-trabajadores-rurales-en-plaza-de-mayo/
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