Chile : ¿Renuncia o despido? Javiera Moraga R. La Intendenta del Biobío, Jacqueline van Rysselberghe dejó finalmente su cargo de jefa regional. El anuncio dado a conocer por ella misma, frente a un solitario micrófono erguido en las puertas de La Moneda, persigue apaciguar los ánimos de guerrilla que durante ocho semanas han mantenido enfrentados a RN y la UDI. Y peor aún: quehan opacado los anuncios sociales de la administración Piñera durante el mes de marzo. Pero, ¿será tan fácil cerrar el impasse Van Rysselberghe?

Hay días en que se lee la prensa y nada parece encajar. Hace poco El País publicó que la Yakuza, la mafia

japonesa, está convertida en una ONG preocupada de enviar comida y agua a los evacuados del terremoto de Japón del 11-M. Curiosa, por decir lo menos, esta faceta filantrópica de la Yakuza. Algunos expertos dicen que este cambio tiene que ver con la marginación que han experimentado las yakusas en la sociedad nipona y por eso hoy están empeñados en ayudar a otros. ¿Valdrá la pena comprarse el cuento? No. Y es que basta excavar unos centímetros de profundidad para entender la real motivación de la Yakuza: posicionarse para conseguir contratos para sus compañías lícitas, la mayoría empresas constructoras que deberán levantar Japón en los próximos años. Claramente los propósitos altruistas de la Yakusa, no lo son del todo.

La reflexión sobre lo que sucede con la mafia japonesa –que tiene 80mil miembros- se podría llevar perfectamente al caso de Jacqueline van Rysselberghe. Finalmente, la ex Intendenta del Biobío renunció a su cargo para apaciguar supuestamente los ánimos de guerrilla que durante ocho semanas han mantenido enfrentadas a las tiendas políticas de RN y la UDI. Y peor aún: que han opacado los anuncios sociales de la administración Piñera durante el mes de marzo.
Desde que el senador del MAS, Alejandro Navarro difundiera un video con declaraciones de la entonces autoridad regional frente a vecinos de la población La Aurora, donde Van Rysselberghe prometió que podía dar “casas para todos”, a través de una historia que ella “había inventado” al ministerio de Vivienda, los hechos comenzaron una escalada política de proporciones. Primero, la UDI a través de Jovino Novoa blindó a la Intendenta. Luego La Moneda hizo todo lo posible para no dejarla caer. Finalmente la Concertación vio la mejor oportunidad para presentar su primera acusación constitucional frente al Congreso. El desenlace: la Intendenta fuera del gobierno; ocho semanas de desgaste brutal y proyectos de la administración Piñera que han pasado sin pena ni gloria.

Pero deberíamos partir desmenuzando esto desde el origen. ¿Fueron acaso las promesas de Van Rysselberghe un acto de filantropía con los vecinos de la población La Aurora? No precisamente. Los políticos no trabajan por filantropía sino por votos. Y así lo ha demostrado la ex Intendenta a lo largo de su carrera política. Incluso alguien la describió como una mujer leal a sus amigos, pero sin piedad contra sus enemigos, al punto de que era difícil que volviera a salir pasto por donde ella había pisado alguna vez.

Durante los últimos meses vimos como La Moneda puso todos los recursos para realizar una operación de salvataje para la máxima autoridad regional. A tal punto, que el presidente Piñera estuvo dispuesto en varias ocasiones ir hasta en contra Renovación Nacional (RN), su partido madre, la tienda política que no estaba dispuesta a mantener a Van Rysselberghe en su cargo y que incluso dio libertad de acción a sus parlamentarios. Pero eso no es todo. La UDI, desde donde proviene la ex Intendenta del Biobío, en un primer momento cerró filas a favor de la autoridad regional, en los últimos días no supo como salir del impasse, no sólo por Norambuena y Lobos, dos parlamentarios que se habían vuelto totalmente díscolos y que pidieron libertad de acción a su partido; sino porque la conmemoración de los 20 años del asesinato de Jaime Guzmán pasó a segundo plano, luego de que prensa estuviera monitoreando todo el tiempo la actuación de Van Rysselberghe con sus pares y con La Moneda, en vez de los anuncios de la UDI para reivindicar la muerte de Guzmán.

Y es que hace pocas horas se conoció que el gremialismo intentó persuadir hace unos días a Van Rysselberghe para que renunciará y evitar así lo que sucedió el 2008 con Yasna Provoste. A la ex secretaria de Estado del gobierno de Michelle Bachelet se le intentó convencer de dejar su cargo, a cambio de retirar el libelo del Congreso, pero la entonces ministra se negó. Esa decisión tuvo un costo altísimo para Provoste, quien fue destituida e inhabilitada para optar por cargos públicos por un lapsus de cinco años.

Por eso si Van Rysselbergheera destituida tampoco podía optar a ningún cargo público, a pesar de que las elecciones senatoriales están a un paso y se supone que el cupo senatorial es  una de las máximas aspiraciones de la ex jefa regional. Lo cierto es que con el paso de los días Van Rysselberghe que parecía tener un apoyo irrestricto fue testigo de la fuga de sus correligionarios, cada día más tibios respecto a sus lealtades con ella. Primero fue Andrés Chadwick, vicepresidente de la UDI, quien dijo al noticiero 24H que “personalmente si me hubiera tocado enfrentar una situación de esa naturaleza hubiera renunciado en febrero”. El viernes, Pablo Longueira el ex timonel de la UDI, fue otro de los que sacó la voz. Así en declaraciones a La Segunda calificó como dramático “el espectáculo que han dado en especial estas últimas semanas el Gobierno, la UDI y RN con respecto a la situación de la intendenta de la Octava Región”. Y remató: “para ser honestos, jamás me imaginé que pasaría esto (…) todo esto se podría haber evitado”.

A pesar de estar incómodo con lo sucedido, Longueira está convencido que esta es una estrategia de la Concertación para inhabilitar a Van Rysselberghe en su posible cupo senatorial.“Ella y Jorge Ulloa son los únicos líderes políticos de esa región capaces de recuperar dicho cupo senatorial. Por lo tanto, desde el MAS de Navarro hasta la DC de Sabag, se la iban a jugar para presentarla, porque electoralmente les conviene. Necesitan sacarla de cualquier forma de la arena política”, insistió.

Lo cierto es que así como los políticos no hacen filantropía, tampoco lo hace La Moneda. Y por esotal vez no esté demás recordar cómo fue la nominación de Jacqueline van Rysselberghe en su puesto. Tras el caos del terremoto, la entonces alcaldesa tenía un protagonismo infinito con los problemas que enfrentaba Concepción, una de las ciudades más afectadas por el sismo 8.8. En cosa de días no sólo era la autoridad que acaparó más cámaras, más entrevistas y más popularidad, sino que era la voz política con más agallas, con una ojeras eternas que demostraba cuanto se las estaba jugando por Concepción, que aparecía con el mismo blue jeans y la misma polera dando la impresión que ni siquiera pasaba por su casa, porque estar con su pueblo era más importante. Ella sólo clamaba por ayuda. Pero así como era la mujer del momento si La Moneda no la reclutaba dentro de sus filas podía transformarse en el peor enemigo de Piñera; en la piedra en el zapato; y en una crítica ferviente a su administración gubernamental.

Pero Piñera la convenció y el testimonio de eso es la foto oficial de los Intendentes –nombrados a los pocos días de asumir Piñera-, donde Van Rysselberghe sale con su mismo blue jeans y polera y se pone orgullosa la chaqueta roja del piñerismo. Para ella un premio por su trabajo en el terremoto, para Piñera la mejor manera de despejar ciertas pistas políticas. Meses más tarde sus cercanos revelaban que Van Rysselberghe no estaba contenta. Que ser Intendenta del Biobío le había traído sólo problemas y quejas, y que como alcaldesa siempre había tenido un lugar más visible en la política regional. Varias veces Van Rysselberghe pensó que había hecho un mal cálculo político. Mientras tanto Piñera –quien ha sido el más interesado en retenerla- le pidió finalmente la renuncia.

Y es que el Presidente considera que el mes de marzo ha sido uno de los mejores de su gobierno, con cuatro anuncios sociales estrella: el proyecto de post natal; el bono por las Bodas de Oro; la eliminación del 7% de los jubilados; y el salario ético mínimo. Y todo, absolutamente todo, se ha visto opacado por el espectáculo de la UDI y RN defendiendo o sacrificando a Van Rysselberghe. Así, Sebastián Piñera que no hace nada sin guiarse por lo que dicen las encuestas, le exigió a la ex Intendenta uitarse del camino. Una petición que caló en lo más profundo y con un gran pesa en la ex alcaldesa, ya que hasta el viernes tras la romería de Jaime Guzmán y consultada por la prensa ella aseguró “que no tenía pensado renunciar”.  Frente a un micrófono solitario en La Moneda, Jacqueline van Rysselberghe leyó dos hojas. Con voz fuerte y clara renunció. Luego dio media vuelta y se fue. Pero quienes la conocen sabe que la ex Intendenta pasará la cuenta a cada uno de sus detractores. Es sólo cosa de sentarse a esperar. Por eso la luz de los hechos ¿es usteduno de esos ciudadanos que aún cree en la filantropía política?

Fuente, vìa :
http://radio.uchile.cl/noticias/108965/