jueves, 26 de agosto de 2010

VIOLENCIA EN MÉXICO: Hallan 72 cadáveres fusilados por el narco en un rancho de Tamaulipas

La violencia en México se supera a sí misma. La Marina encontró ayer los cadáveres de 72 personas en un rancho de las inmediaciones de San Fernando, en el Estado de Tamaulipas, en la mayor matanza atribuida al crimen organizado de la que se tiene noticia. Por el aspecto de los cuerpos, las víctimas (58 hombres y 14 mujeres) han sido ejecutadas en los últimos tres días.
El hallazgo se produjo cuando los militares se enfrentaron a un grupo de sicarios. El personal de la Armada fue alertado por un hombre que, bañado en sangre, se presentó en un puesto de control en la carretera en busca de ayuda pues, dijo, había sido herido de bala en un rancho próximo. Elementos de Infantería de Marina, con apoyo aéreo, localizaron y persiguieron a los criminales, que huían en varios vehículos. En el choque murieron un soldado y tres pistoleros. Fue detenido un menor de edad.
En un comunicado oficial se detalla que los cuerpos fueron encontrados en el mismo lugar donde se presume que ocurrió la ejecución, por lo que se deduce que se trató de un «fusilamiento masivo» con armas de grueso calibre. La mayoría de los cadáveres presentaban el tiro de gracia en la nuca.
Un periodista de Radio Fórmula y un policía anónimo mencionado por la agencia Ap sostienen que los ejecutados formaban parte de un grupo de emigrantes irregulares que viajarían próximamente a EE.UU., cuya frontera dista 150 kilómetros del rancho.

Autoridades mexicanas investigan el asesinato de 72 personas, al parecer emigrantes indocumentados de El Salvador, Honduras, Ecuador y Brasil, cuyos cadáveres fueron hallados en un rancho ubicado en el noreste del país.

  Los cuerpos aparecieron en la localidad de San Fernando, en el estado de Tamaulipas, 58 eran hombres y 14 mujeres.

Según confirmó el secretario técnico del Consejo de Seguridad Nacional y vocero de la Estrategia de Seguridad Nacional, Alejandro Poiré, todavía está sin confirmar la nacionalidad de los difuntos y los motivos de los homicidios.

Los cadáveres fueron encontrados ayer durante un operativo en que integrantes de la fuerza naval repelieron una agresión de presuntos integrantes de la delincuencia organizada en San Fernando.

Una persona herida de origen ecuatoriano se presentó ante personal de la Armada de México para solicitar su apoyo ante la agresión recibida, a partir de ahí se supo del crimen.

Constituye "un suceso sumamente grave, absolutamente indignante y que exige la condena unánime de toda la sociedad y de todas las autoridades, que no admite titubeo en nuestra condena del crimen", dijo Poiré.

Autoridades del Gobierno Federal trabajan en las averiguaciones y otros trámites pertinentes de acuerdo con sus competencias.

Conforme avancen las pesquisas se informará del caso, aseguró el funcionario, quien inscribió el suceso en el contexto de los enfrentamientos entre el cartel del Golfo y Los Zetas, que anteriormente operaban de manera coordinada.

Por esa pugna interna, desde finales del año pasado aumentó sustancialmente la violencia en el noreste del país, admitió el representante gubernamental.

Algunas organizaciones criminales se dedican al secuestro y extorsión de migrantes indocumentados de origen centro y suramericano.

Esto sugiere que la delincuencia organizada está en una situación muy adversa para abastecerse de recursos financieros y para reclutar personas voluntariamente, señaló Poiré.

El subsecretario de Relaciones Exteriores Salvador Beltrán del Río informó que aunque no existe certeza de la nacionalidad de las 72 víctimas, se procedió a dar conocimiento del incidente a embajadas y representaciones diplomáticas de los cuatro países aludidos.

Ello tiene el propósito, precisó, de que colaboren con la Procuraduría General de la República y otras instancias competentes, tanto locales como federales, en la identificación de los asesinados en San Fernando.

Están en marcha todas las diligencias, subrayó el vocero de la Procuraduría General de la República, Ricardo Nájera, una de ellas, ilustró, son las relacionadas con criminalística de campo a fin de determinar cómo perdieron la vida esas 72 personas.

Lo peor del horror es cuando se vuelve impredecible. Cuando, por ejemplo, una narcofosa ya no es una narcofosa. Cuando uno tiene que abrir una nueva categoría ante el hallazgo, en la noche del martes, de 72 cadáveres en Tamaulipas, en el noreste de México. Una nueva categoría porque el hecho no se parece a los siete cuerpos encontrados la semana pasada en una mina en Hidalgo, a una hora de la capital mexicana; o a los 55 encontrados en mayo pasado en la turística Taxco (Guerrero), a menos de 200 kilómetros de la metrópoli. Al fin y al cabo, en México saber que de repente aparecen decenas de muertos ya no es noticia. Pero que sean extranjeros cambia mucho las cosas.
Horas después se supo que el sobreviviente, Luis Freddy Lala Pomadilla, es de origen ecuatoriano. Y que los fallecidos no eran narcos, sino emigrantes sudamericanos y centroamericanos que buscaban llegar a Estados Unidos. El ecuatoriano contó que los delincuentes se identificaron como miembros de la organización criminal de Los Zetas, que trataron de extorsionarlos, y que al negarse fueron acribillados. A él lo dieron por muerto, por lo que pudo huir del rancho donde habían sometido al grupo, que ingresó a México por el sureño Estado de Chiapas.
En realidad, lo que contó el sobreviviente no es nada nuevo. Según la Comisión Nacional de Derechos Humanos, los grupos criminales secuestraron a 9.758 migrantes tan solo de septiembre de 2008 a febrero de 2009. La cifra extraoficial, es decir, incluyendo casos no detectados, podría llegar a 20.000 para el mismo periodo.
"Lo que queda claro es que en México hay una criminalización de los migrantes: son un botín para la delincuencia organizada", explica a EL PAÍS Mario Santiago, director de investigación de Fundación I(de)has. "Todos los días hay secuestros de migrantes que pasan en los trenes que van al norte, se les extorsiona, y a los que no pueden pagar por su liberación se les mata. A las mujeres se les hace trabajar con los secuestradores o se les prostituye. Y la cuota varía, desde 50 pesos [tres euros] hasta miles de pesos, esto último sobre todo cuando tienen familiares en Estados Unidos". Santiago explica que los narcos tienen casas de seguridad en Chiapas, Tabasco, Veracruz y Tamaulipas, donde retienen a los migrantes que secuestran. "Pero lo peor es que no hay persecución ni investigación de muchos de estos casos", dice en entrevista telefónica desde Tapachula, en la frontera con Guatemala.
Aunque el Gobierno del presidente Felipe Calderón pidió esperar al trabajo de los peritos para determinar la identidad de las víctimas, estos sí reconocieron que se podría tratar de ciudadanos de Ecuador, Brasil, El Salvador y Honduras. El portavoz Alejandro Poiré dijo que esta matanza ocurre en el marco del enfrentamiento que en Tamaulipas se da entre el cartel del Golfo y Los Zetas. El funcionario se aventuró a sugerir que algunas organizaciones criminales están enfrentando una situación muy adversa para abastecerse tanto de recursos económicos como de integrantes. "La actuación del Estado los merma" en su capacidad, dijo Poiré. Por ello estarían atacando a los migrantes.
fuentes :

http://www.abc.es/20100826/internacional/hallan-cadaveres-fusilados-narco-20100826.html
http://www.prensa-latina.cu/index.php?option=com_content&task=view&id=215415&Itemid=1
 http://www.elpais.com/articulo/internacional/Hallados/72/cuerpos/inmigrantes/papeles/rancho/Mexico/elpepuint/20100826elpepiint_6/Tes

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Archivo del blog

free counters

Datos personales

Mi foto
Malas noticias en los periòdicos, asesinatos, enfermedad, pobreza, dolor, injusticias, discriminaciòn, guerras, lo grave es que nos parece normal.

Ecologia2