Israel, una prisión de terror, miles de palestinos en huelga de hambre

Es inconcebible que la Policía encarcele personas, sin siquiera acusarlas. Y luego, además, las ponga tras las rejas durante mucho tiempo, sin siquiera tener un juicio.

Es decir, sólo porque al policía le cayó usted mal, sólo porque el policía no les gustaste, para dentro de la cárcel, lo increíble es que sin acusación, así, porque el policía lo creyó.

Pues esto es lo que sufren y han sufrido, y parece, seguirán sufriendo, miles de palestinos, que su pecado pareciera ser, haber nacido en Palestina. La policía israelí, los detiene, los arresta y los mete a la prisión, incluso por manadas.

Luego las autoridades israelíes se encargan además de torturarlos y maltratarlos. Más indignante aún es que régimen de Israel se presente como un sistema democrático defensor de los derechos humanos, cuando encarcela gente en contra del más básico precepto de la humanidad, que para encarcelar a alguien es necesario primero acusarlo, y luego darle un juicio justo, pero ellos ni siquiera los acusan.

Como dato, hay más de 7000 palestinos presos en cárceles israelíes, de los cuales 300, son niños, niños presos palestinos, con la misma suerte, sin pena, sin acusación, sin juicio. Esta es la razón principal por lo que hace unos días, el 17 de abril, estalló una mega huelga de hambre dentro de las cárceles israelíes.

Casi 2000 palestinos presos se declararon en ayuno hasta la muerte para a ver si los israelíes dejan de violarles sus derechos y para ver si la comunidad internacional presiona a régimen de Israel para que detengan estas atrocidades.

“Israel ha establecido un apartheid judicial que garantiza la impunidad para los israelíes que han cometido delitos contra los palestinos y que criminaliza la presencia de la Resistencia palestina”, son palabras del dirigente del Movimiento Palestino de Liberación Nacional (Al-Fatah), Marwan Barghouti, en publicadas en el propio New York Times.

Barghouti es preso palestino que lidera la protesta y quien lanzó el llamado a la huelga de hambre; en 2002, considerado comandante de la Segunda Intifada fue arrestado en Ramalá, Cisjordania, y condenado por régimen de Tel Aviv a cinco cadenas perpetuas por el asesinato de cuatro israelíes y un monje greco-orotodoxo.

Para Israel es un terrorista, para Palestina es un héroe. Barghouti encabeza las encuestas para las elecciones que sustituirán al presidente de Palestina, Mahmud Abás. Así, en 8 prisiones israelíes, ante el llamado de este líder también del Al-Fatah, los presos se están poniendo en ayuno, aún frente a la burla de grupos pro israelíes que hacen barbacoas o carne BBQ frente a las cárceles para que el olor los provoque.

Pero es que el llamado es fuerte, sobretodo porque Barghouti es considerado como el Nelson Mandela de Palestina, carismático y famoso, que lo entiende una población que en un 21 % ha estado tras las rejas.

"Mejorar condiciones de visitas familiares, permitiendo a los niños visitar a sus padres sin acoso, las negligencias médicas, el cierre de hospitales, la liberación de los presos enfermos, la política de traslado entre cárceles y juzgados, el fin de la detención administrativa o políticas de aislamiento", entre algunas cosas que pide la huelga, informa el ministro palestino Isa Qaraqe, responsable del Comité de Asuntos de Prisioneros.

¿Qué le depara a esta sangrienta experiencia de haber nacido en Palestina y ser cazado por israelíes por tener cara de palestino? ¿Qué le depara a este rincón de la humanidad que da vergüenza mencionarlo cuando hay viajes espaciales a Marte para buscar agua, cuando el agua y la justicia se le prohíbe a los palestinos?

En Detrás de la Razón, preguntamos. Apoyamos la idea de justicia en cada quién y cuestionamos todo. Los analistas contestan y usted en su casa concluye. Y si la realidad hace lo que quiere, entonces nosotros volveremos a preguntar.

Lo importante es descubrir los ángulos que no dicen los gobiernos ni los medios de comunicación. El análisis, las preguntas y respuestas a las diez treinta de la noche, desde los estudios de Teherán; Londres, siete y Madrid, ocho de la tarde; México a las 12 y Colombia, una de la tarde.

Por Roberto de la Madrid