Las personas acampadas del Movimiento 15M en la Puerta del Sol de
Madrid acordaron en una multitudinaria asamblea, con alrededor de 3 mil
personas, permanecer de momento acampadas en la céntrica plaza
madrileña. En próximas asambleas debatirán hasta cuando permanecerán
acampadas y ya se ha empezado a trabajar en reestructurar el campamento
para mejorar su funcionamiento.
Por otro lado, las asambleas de están expandiendo a barrios y pueblos
para motivar la participación de muchas más personas. Se estima que
alrededor de 50 mil personas participaron en las asambleas
descentralizadas.
En la mayoría de ciudades también se ha tomado la decisión de seguir
con las acampadas, como los casos de Barcelona, Valencia, Bilbao,
Santiago de Compostela o Sevilla. En Toledo, se ha decidido cambiar la
acampada por puntos de información permamente.
Pero además, la forma de protesta se va exportando a otros lugares.
Por sexto día consecutivo, en Atenas, Grecia, se congregan miles de
personas ante el Parlamento. El domingo llegaron a ser más de 30 mil
personas, que protestan contra las medidas de austeridad que ha tomado
su Gobierno. Aseguran que las concentraciones del Estado español les han
motivado a salir a las calles. Grecia con la economía en la cuerda
floja es uno de los países supuestamente rescatados por la Unión
Europea, y ahora para pagar la deuda generada por el préstamos su
Gobierno ha dicho que tendrá que hacer más recortes sociales.
Por otro lado, en París, Francia, la policía desalojó violentamente a
miles de indignadas e indignados que se concentraban en la Plaza de la
Bastilla. Los agentes golpearon con dureza a los manifestantes y usaron
gases lacrimógenos. Los franceses dicen que se solidarizan con las
protestas españolas, pero que ellos también quieren comenzar su propia
protesta.
Parece claro, que tanto la manifestación del día 15 de mayo como el
movimiento que se ha ido extendiendo por las plazas de todo el
territorio es una oleada de aire fresco a una situación corrompida. Esa,
al menos, es la opinión de Agustín Morán, del Centro de Asesoría y
Estudios Sociales, CAES, con sede en Madrid, y al micrófono del programa
‘El Candelero’, de Radio Vallekas.
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