De todas maneras, con esa estrecha relación que existe entre los
jefes del gobierno y los jefes del narco no se puede eliminar la
posibilidad de un gran golpe publicitario que ayude al triunfo electoral
del PRI o del PAN.
1. Durante el sexenio de
Felipe Calderón fueron asesinadas unas 12 mil personas por año, mil por
mes y 34 cada día; pero en el último mes, quizá por la venida del papa y
el inicio de las campañas políticas, he escuchado por los medios
electrónicos mucho menos asesinatos que los acostumbrados. Me pregunto:
¿Será porque el gobierno de Calderón esté acabando con ellos? ¿Será que
se puso a negociar con los jefes, cuestión a que se ha negado? o, de
plano, ¿Le han pagado mucho dinero a los medios electrónicos para que
guarden silencio? También es probable que ya mi cerebro se haya
“educado” a oír a diario de matanzas y no les preste atención por ser
asuntos cotidianos. Lo que sea, pero ya 60 mil muertos en menos de seis
años es un montón de muertos para cualquier gobierno del mundo que se
autodefina democrático. Pero nos hemos acostumbrado que ya nos parece
natural que cada mes muera un millar de guerreros e inocentes.
2. Lo que nadie podría
aceptar ni “nadita” es que los narcos estén siendo derrotados por el
gobierno. Más bien es lo contrario: los estudiosos del asunto demuestran
que el narcotráfico y eso que llaman “delincuencia organizada” es cada
vez más grande en el plano nacional e internacional. El tan fuerte el
narco que en la recién reunión de los países firmantes del TLCAN (EEUU,
Canadá y México) se acordó unir todas las fuerzas para acabarlo, sobre
todo el que opera en la frontera norte de México. Lo que sucede es que
ello es una declaración más, dado que EEUU es el principal consumidor de
droga en el mundo y, al mismo tiempo, casi el único vendedor de armas a
todos los bandos: al ejército del gobierno mexicano y a los
narcotraficantes. Si en la bolsa comercial los EEUU compran la droga en
cantidades multimillonarias se recuperan vendiendo armas en grandes
cantidades para igualar la balanza comercial.
3. Lo que no puede
aceptar Calderón es que negocia –muy debajo del agua- con fuertes
sectores del narcotráfico. El grita a los cuatro vientos que no negocia,
pero ha sido demostrado que él y el sector sinaloense del Chapo Guzmán
mantienen estrechos lazos para acabar con el otro sector del narco, es
decir, con los Zetas. Calderón quiere mostrar que su gobierno es de gran
fortaleza y que siempre va adelante; sin embargo es la mejor manera
para encubrir su debilidad y las negociaciones que realiza; además si no
las estuviera haciendo estaría demostrando una enorme incapacidad y
permitiendo que sigan muriendo 34 mexicanos cada día. ¿Acaso Calderón
mandó el ejército a la calle en diciembre de 2006 porque se sentía
fuerte o, por el contrario, porque quería demostrar ante AMLO que no era
débil y por tanto no podría ser derrocado? Calderón habla de fuerza
porque el débil, parece que va a la ofensiva, pero retrocede; grito
poseer lo que carece.
4. O, lo más seguro, es
que el gobierno haya negociado con los poderosos empresarios de los
medios (Azcárraga, Salinas Pliego) que “ya no informen mucho de
asesinatos y muertes en la República para que las campañas políticas y
los últimos meses de su gobierno terminen en paz”. En México, y en todo
el mundo, los medios de información (radio y TV) funcionan al mismo
ritmo de quien les paga y el gobierno mexicano es el principal
subsidiario de los medios. De lo que los analistas mexicanos están
seguros es que en la campaña política –sobre todo en la del PRI y del
PAN- hace mucho que están metidos los narcotraficantes con el fin de
asegurar a sus personajes claves dentro de la estructura de poder.
¿Puede dudarse acaso de la enorme habilidad de los seguidores de las
distintas fracciones del narco mexicano que se ha probado que han
penetrado en Gobernación, la PGR, la policía federal, el ejército y
demás?
5. De todas maneras, con
esa estrecha relación que existe entre los jefes del gobierno y los
jefes del narco no se puede eliminar la posibilidad de un gran golpe
publicitario que ayude al triunfo electoral del PRI o del PAN. Nadie
había oído hablar de Peña Nieto o de Vázquez Mota, como dicen por aquí:
“no los conocían ni en su casa”; pero ahora con las inventadas encuestas
y los medios televisivos y de radio, se encuentran ya en primero y
segundo lugar. ¿De cuál independencia y libertad para depositar el voto
se habla si sin conocerlos los electores ya tienen la manita lista,
dispuesta, maniatada, para votar por Peña o Vázquez? ¿Por qué no por
López Obrador? Porque la TV dice que es malo, porque está aliado a Hugo
Chávez, a Fidel Castro; porque bloqueó el Paseo de la Reforma, es amigo
de los comunistas, tiene amistad con los abortistas y es un “peligro”
para México. Aunque pida perdón, sea amoroso y diga que extiende la
mano, la TV aconseja que nadie le crea.
6. Las encuestas y los
medios de información quieren mantener a López Obrador arrinconado en
tercer lugar con el fin de eliminar sus protestas después de los
comicios, siguiendo el ejemplo de la eliminación de Cuauhtémoc Cárdenas
en 1994. Desde que los encuestadores aparecieron con sus resultados ya
tenían en último lugar a AMLO, debiendo puntos por “sus errores”. Se le
inventó una relación con el gobernante de Venezuela .Hugo Chávez- cuando
ni lo conocía; además ¿Quién inventó que Chávez es un mal gobernante
siendo con mucho de los mejor para los pobres del mundo? Obviamente que a
quienes no gusta Chávez, Evo Morales y los Castro de Cuba es a los
grandes empresarios y al imperio yanqui. ¿Y qué hacen los medios de
información? Pues pintar un espantatontos para que el pueblo tenga miedo
a quienes expropian a los millonarios enriquecidos explotando al
pueblo. Un día entenderá el trabajador.
7. Culpan a López
Obrador de bloquear el Paseo de Reforma en 2006. ¿Qué es ese “Paseo”
sino la avenida de la embajada yanqui, de los grandes bancos, de los más
grandes hoteles y demás negocios capitalistas, de los automóviles y
restaurant de lujo? Yo estuve bloqueando Reforma, Juárez y el Zócalo por
tres semanas las 24 horas del día y no me gustó que no se hiciera en
serio, es decir, un bloqueo total hasta la renuncia del golpista
Calderón, así como de los funcionarios del IFE, del TRIFE y de los
jueces de la SCJN. Todo ese bloqueo que fue muy positivo le ha servido a
los medios de información para hacer propaganda contra López Obrador. Y
hoy tiende la mano AMLO de arrepentimiento como si hubiese cometido
errores y fuera un error luchar en las calles y plazas. Marcos, el
dirigente zapatistas decía: ¿A quién le vamos a pedir perdón por
mantenernos en la miseria, el engaño y muertos de hambre?
pedroe@cablered.net.mxVìa:
http://www.kaosenlared.net
No hay comentarios:
Publicar un comentario