En la ciudad de Valencia la represión policial se está convirtiendo en algo cotidiano. La Delegación del Gobierno ha vuelto a mandar a los policías antidisturbios para reprimir con violencia una nueva manifestación de estudiantes del Instituto de Educación Secundaria Lluis Vives. Los estudiantes protestan contra los recortes sociales y contra las anteriores intervenciones policiales que costaron la detención a varios estudiantes, entre ellos menores de edad.
Hay que recordar el origen de la protesta. El alumnado del Instituto Público protesta porque las aulas carecen de calefacción, por los recortes en Educación, y los chicos y chicas tienen que asistir a clases con mantas.
Las protestas son apoyadas por el profesorado y madres y padres. Pero, el Gobierno, a través de la Delegada en Valencia, Paula Sánchez de León, decidió intentar acallar las voces de los jóvenes a base de cargas policiales y detenciones arbitrarias, como denunciaba la propia directora del Instituto Público.
Este lunes, se ha vuelto a repetir la misma jugada. Los jóvenes han salido a manifestarse. Todos los testigos afirman que las y los estudiantes no actuaron nunca con violencia, simplemente proclamaban con gritos y canciones sus protestas. La policía decidió realizar cargas llegando a agredir incluso a periodistas que cubrían la noticia. Hay al menos 10 detenidos, tres de ellos menores de edad.
La intención de los antidisturbios fue dispersar a los estudiantes por las inmediaciones de las calles de Xàtiva, San Vicente, Troya y Matemático Marzal, así como por la gran vía de Fernando el Católico y junto a la plaza de España, de Valencia. En su regreso hacia el instituto, la Policía ha vuelto a intervenir contra manifestantes, en su mayoría jóvenes aunque también se han podido ver cargas individuales contra viandantes y trabajadores de la zona.
En las inmediaciones del Lluís Vives se han congregado también padres y madres de alumnos que no dudan en arremeter contra la actuación policial. Una abuela acudió a la manifestación junto a su nieta. Poco después se produjo una carga policial en la que los agentes pegaban a toda persona con la que se cruzaban, formara parte o no de la manifestación. Al llegar junto a la abuela con su nieta, detuvieron a la nieta y se la llevaron esposada, ante los gritos y llanto de su abuela que no entendía cómo una policía, supuestamente democrática, actuaba de esa forma.
En youtube se están publicando los vídeos grabados con teléfonos móviles en los que se puede comprobar esa actuación extremadamente beligerante de la Policía Nacional.
Los estudiantes dijeron que el Gobierno, del derechista Partido Popular, tendrá que dar cuenta de la cuantía en euros del despliegue policial para reprimir y contrastar ese gasto con lo que hubiera costado mantener la calefacción en las aulas.
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Audio publicado en Más Voces : www.masvoces.org
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