Tras la represión violenta de la policía en Valencia, las reivindicaciones de las y los estudiantes continúan y se intensifican. Miles de personas han llenado el centro de la ciudad de manera pacífica, junto al Instituto Lluís Vives, símbolo de la ya conocida como ’primavera valenciana’ , en la jornada de protesta más multitudinaria de los últimas días.
Hay que recordar que tras la violenta postura de la Policía Nacional se produjeron 25 detenciones, incluyendo a menores de edad, y decenas de personas heridas por los golpes de los policías antidisturbios.
En la concentración de este martes el mensaje de los jóvenes era claro: no a la violencia. Con libros en las manos no han cesado de gritar: "estas son nuestras armas". En la concentración no sólo han participado estudiantes. Esta vez se les han sumado representantes políticos de la oposición, responsables sindicales, profesores, madres y padres de alumnos.
Una de las grandes reivindicaciones, tras la jornada violenta del lunes, es la dimisión de la Delegada del Gobierno en Valencia, Paula Sánchez de León, cómo última responsable de la acción policial. Además, las críticas llueven también contra el jefe superior de Policía de Valencia, Antonio Moreno, cuya designación fue realizada por el anterior Gobierno del Partido Socialista. Moreno compareció ante la prensa señalando a los jóvenes, muchos de ellos menores de edad, como el “enemigo”, y hablando en un lenguaje que recordaba más a tiempos pasados.
Hasta el Sindicato Unificado de Policía ha criticado la decisión política de cargar contra los estudiantes. Acusan a la Delegada del Gobierno de “querer matar moscas a cañonazos” y piden su inmediata dimisión o cese.
Con el paso de las horas, los medios de comunicación afines a la derecha y ultraderecha que representa el Partido Popular, justificaban la intervención de la policía, criminalizaban las protestas señalando a los estudiantes como violentos, algo que las imágenes de las grabaciones desmienten rotundamente. En la misma línea se han pronunciado algunos dirigentes del Partido Popular. Entre ellos el presidente de la Generaltiat valenciana, Alberto Fabra, que ha acusado a los estudiantes de desarrollar "violentas manifestaciones" con la intención de "desestabilizar" y "desvirtuar" el estado de Derecho.
Sin embargo, amplios sectores de la sociedad opina que es precisamente la desproporcionada e injusta actuación policial la que pone en peligro el Estado de Derecho. Afirman que lo ocurrido en Valencia recuerda mucho a la represión de la dictadura franquista. La violencia policial ha llegado hasta el Congreso de los Diputados, en Madrid, donde diputados de partidos de izquierda sacaron carteles de crítica al Gobierno y defensa de los estudiantes. El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, reclamó “mesura”, justo la que no tuvo la policía que cumple órdenes de su Gobierno. Dijo que la “mesura” es necesaria para no dañar la imagen de España.
Pero sin embargo, el Gobierno ha reforzado la presencia de antidisturbios en Valencia con 150 nuevos agentes procedentes de Barcelona, Sevilla y Valladolid.
Mientras, las y los estudiantes aseguran que seguirán manifestándose para defender "una educación pública, laica y de calidad". Además reclaman la libertad de los detenidos y que se les retire todos los cargos. En multitud de ciudades de todo el Estado español se han anunciado manifestaciones de apoyo. Y en Valencia, se ha anunciado una "gran manifestación" para el miércoles, 22, a las 18 horas.
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Audio publicado en Más Voces : www.masvoces.org
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