La
huella dolorosa de los crímenes causados por la dictadura contra el
pueblo chileno se extiende como un manto de terror hasta nuestros días.
Al acercarse un nuevo aniversario de los crímenes del 23 de agosto de
1984, conocidos como la matanza de la Vega monumental, el efecto de la
impunidad de los criminales sigue causando dolor en los familiares de
los caídos de entonces.
La CNI denominó el operativo como “Operación Alfa Carbón”. En Concepción fueron asesinados Luciano Aedo Arias, Nelson Herrera Riveros y Mario Lagos Rodríguez; en la ciudad de Los Ángeles fue asesinado Mario Mujica Barros y en Valdivia lo fueron Rogelio Tapia de la Puente, Raúl Barrientos Matamala y Juan José Boncompte Andreu. Los asesinos siguen sin recibir condena y los familiares de los caídos siguen esperando respuesta de la justicia.
Reiterando
una típica maniobra de desinformación utilizada por la dictadura, los
crímenes del 23 de agosto fueron presentados como “muertos en
enfrentamientos”. Sin embargo, como ha quedado acreditado en el proceso
judicial, todos los asesinados habían sido señalados como blancos a
ejecutar por los mandos de la CNI.
En
el momento en que asignan las misiones y tareas para cada equipo
implicado en la operación represiva, los jerarcas del operativo
indicaron quiénes serían apresados, qué casas allanadas y quiénes debían
ser ejecutados. Este método era una práctica común de los aparatos
represivos para tratar de silenciar a los opositores y miembros de la
resistencia que se esforzaban por desarrollar la lucha contra el tirano y
su régimen de oprobio.
La práctica de los falsos enfrentamientos fue utilizada por la CNI desde 1977, es decir, desde el momento que cambió su denominación de DINA
a CNI cambió también sus estilos represivos y de aniquilamiento de
opositores. El método de detener, asesinar y hacer desaparecer
opositores dejó de usarse de manera preferente; no significa que desde
entonces no haya habido detenidos desaparecidos sino que éste método de
exterminio fue utilizado en menos ocasiones y con menos frecuencia que
en los primeros años de la DINA.
El
método escogido como principal arma represiva por la CNI fue el
asesinato, encubierto con la figura de enfrentamientos, sustentado en la
protección y arrogancia del poder absoluto y en el soporte
propagandístico de los medios de comunicación controlados absolutamente
por el aparataje empresarial y dictatorial.
La
CNI comenzó utilizando la farsa del enfrentamiento para encubrir el
asesinato de uno o dos opositores ejecutados. Este estilo selectivo y
parcial fue repetido decenas de veces por los expertos criminales de la
CNI, que en realidad, salvo la jerarquía suprema, eran los mismos que se
habían iniciado matando, torturando y haciendo desaparecer personas
bajo la dirección de la DINA.
Progresivamente,
el método del falso enfrentamiento fue siendo utilizado de manera más
abusiva y en un solo operativo podían ejecutar a varias personas. Por la
magnitud y amplitud de la acción represiva y por el número de muertos
que causa, la matanza del
23 de
agosto se inscribe entre las acciones criminales más repudiables de la
dictadura. En ese operativo la CNI ejecutó a siete miembros del MIR de la zona sur del país; el mismo día, pero en otro operativo efectuado en Santiago, ejecutó a dos miembros del FPMR.
Con el paso del tiempo los métodos criminales se convertían en
prácticas habituales de los aparatos represivos, acicateados por la
inmunidad del poder y el aplauso canalla de la prensa servil.
Dentro
de estas prácticas de exterminios masivos, presentados como
enfrentamientos, en noviembre del 81 la CNI asesinó a tres miembros del MIR y
un socialista en Santiago; los miristas eran originarios de la zona
penquista, habían sido capturados y luego fueron ejecutados. Casi un año
antes de los sucesos de la Vega Monumental, en septiembre del 83,
también en un solo día la CNI ejecutó a cinco miembros del MIR en un
operativo ocurrido en las calles Fuente Ovejuna y Janequeo de la capital. Con el mismo disfraz, el 15 y 16 junio del 87, fueron asesinados 12 miembros del FPMR en la operación conocida como matanza de Corpus Cristi.
Por Darío Nuñez
Fuente, vìa :
http://www.elciudadano.cl/2011/08/28/la-costumbre-de-matar-y-el-metodo-de-los-falsos-enfrentamientos/
http://www.elciudadano.cl/2011/08/28/la-costumbre-de-matar-y-el-metodo-de-los-falsos-enfrentamientos/
No hay comentarios:
Publicar un comentario