domingo, 2 de mayo de 2010

Chile: En el día de los trabajadores: ¿Vives para trabajar o Trabajas para vivir?

Pasando las celebraciones y recuerdos por las luchas de los trabajadores, a años del auge de los sindicatos y a pasos de una flexibilización laboral ¿Estamos más contentos los trabajadores?
"Aquellos que tienen la suerte de ser explotados", dice un cesante por ahí en un tema de Leo Masliah. Y lo dice con pena, pues con lo fregado que está conseguir pega'. En muchos lugares, pasado el auge patalean en la desazon y es lo que ocurrió en esta región. Pero más allá de la cesantia, quienes siguen trabajando, ¿Lo pasan bien en sus trabajos? ¿Sienten que tienen trabajos dignos? ¿Son conocidos sus derechos y respetados?

Según varios estudios que han cubierto la última década, sobre todo los encaminados por Harold Bayer, en los últimos cuarenta años Chile ha experimentado un número significativo de transformaciones económicas, sociales y políticas. Pero la desigualdad de ingresos parece no inmutarse ante estos cambios. Y este es sólo uno de los debates entorno a la realidad laboral presente en nuestro país. Hay inquietudes y cuestionamientos que tienen que ver con el tiempo libre, la familia y el trabajo, el maltrato laboral a las mujeres, trabajo infantil, la subcontratación, cuestiones en las que si bien es cierto se ha avanzado, aún hay pendientes compromisos más ferreos.

El historiador Miguel Amorós acaba con estas discusiones de manera mucho más frontal aún señalando que "el reino de la libertad suplantará al reino de la necesidad cuando el hombre se emancipe completamente del trabajo. Por consiguiente, la sociedad a la que deben aspirar los trabajadores es una sociedad no basada en el trabajo, una sociedad en la que el trabajo no sea considerado como la ocupación principal, en el que la vida no dependa absolutamente del trabajo, en fin, en la que nadie tenga que “ganarse la vida” trabajando, porque una sociedad así es incompatible con el bienestar y con la libertad".

Muchos apostarán a que esta República invocada por Amorós es una República de vagos y delincuentes, pero no. 
fuente, vìa:
http://www.elrepuertero.cl/admin/render/noticia/21743

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