El candidato del PSOE a la Presidencia del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba,
ha asegurado que el referéndum que tiene previsto convocar el
presidente de Grecia, George Papandreu, sobre el rescate aprobado por
los líderes europeos es "una mala decisión" porque "pospone la solución
de la crisis griega y de la inestabilidad europea". Según Rubalcaba
"Grecia decide retrasar su ajuste" y España "va a sufrir esa decisión".
La vicepresidenta del Gobierno y ministra de Economía, Elena Salgado,
ha calificado de "mala" la decisión del Gobierno griego, y ha añadido
que "nadie se esperaba esto" y que ha sido una "sorpresa absoluta".
El ministro de Presidencia y cabeza de lista del PSOE al Congreso por Álava, Ramón Jáuregui,
opina que la Unión Europea debe trasladar al mundo económico "la
confianza" de que es "una entidad que cumple sus compromisos y sus
acuerdos". "Desgraciadamente, la convocatoria del referéndum por
Papandreu pone en cuestión el cumplimiento de esos compromisos", ha
añadido. A su juicio "no hay más alternativa en el caso griego que un
acuerdo político de todas las fuerzas políticas griegas con las
autoridades europeas para cumplir lo que fue el acuerdo del jueves
pasado del Consejo Europeo".
El ministro de Fomento y portavoz del Gobierno de España, José Blanco,
ha afirmado que la decisión de someter el acuerdo europeo a referéndum
"no es una buena decisión para Europa ni para España", y que traerá
"como consecuencia el retraso en la resolución del problema de Grecia".
Por su parte, el secretario de Estado para la UE, Diego López Garrido
ha advertido de que "las convocatorias de referéndum deben restrigirse a
motivos de largo alcance, como reformas constitucionales".
"Si Grecia lleva adelante su referéndum y ese referéndum saliera en
contra de que se aceptasen los acuerdos de la quita de la deuda griega,
Grecia se enfrentaría a una situación de quiebra y a la salida de la
zona euro, y eso sería una decisión muy negativa para Grecia, como
también lo sería para la zona euro", ha añadido.
Según Garrido, la decisión responde a "razones de política interna
griega", ya que Yorgos Papandreou "no se siente suficientemente
respaldado políticamente y ha acudido a esta fórmula", que "no es la más
adecuada, ni en la forma ni en el fondo". No lo es el fondo "porque
afecta a unos acuerdos que se han tomado hace unos pocos días y los pone
en cuestión" y tampoco lo es en la forma "porque estas medidas de
política económica diaria no se deben someter a la decisión popular,
para eso existen las instituciones del Gobierno y del Parlamento".
Según el Artículo 92 de la Constitución Española;
1. Las decisiones políticas de especial trascendencia podrán ser sometidas a referéndum consultivo de todos los ciudadanos.
2. El referéndum será convocado por el Rey, mediante propuesta del
Presidente del Gobierno, previamente autorizada por el Congreso de los
Diputados.
3. Una Ley orgánica regulará las condiciones y el
procedimiento de las distintas modalidades de referéndum previstas en
esta Constitución.
El art. 44.2 de la Constitución griega dice así;
"El Presidente de la República podrá proclamar por decreto un referéndum sobre cuestiones nacionales de carácter crucial".
Recordemos que la cumbre europea del 26 de Octubre
-en la que parcicipó el Consejo Europeo, presidentes de varios países,
el FMI y un representante de la banca privada- decidió una recapitalización bancaria de 106.000 millones, es decir, otra inyección de capital público disponible para la banca privada; la ampliación del Fondo de Estabilidad Financiera Europea hasta 1 billón de euros
(4 veces más del capital con el que contaba), dinero que aún no existe y
no se sabe de dónde va a salir; y una "reestructuración de la deuda
griega" consistente en una "quita" del 50%". Por supuesto, dicha "reestructuración" implicaría recortes sociales aún más duros de los que se han tomado ya en Grecia.
Desde Attac,
mencionan las "las dramáticas consecuencias sociales que ha causado ya"
el pago de una deuda de intereses abusivos. Por su parte, Ecologistas en Acción habla de una "victoria de los movimientos sociales" en Grecia.
Si los griegos dicen "no" (según una reciente encuesta el 60% de ellos
lo hará así) a una decisión tomada desde Europa y al margen del
gobierno y el pueblo griego, es posible que estén dando el primer paso
para una suspensión de pagos, la salida del euro, la vuelta al dracma y
la negativa al pago del 100% de la deuda, tal y cómo ocurrió en
Islandia. Tal decisión "de política económica diaria" según Garrido,
marcará la senda que recorrerá este país probablemente en décadas.
Vìa :
http://tercerainformacion.es/spip.php?article30295
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