Los pobres no son pobres por decisión propia. Sin embargo, existe el
prejuicio de que es así. Un convencionalismo que está llevando a muchos
Gobiernos a tomar medidas bien para, supuestamente, motivarles a salir
de la miseria, bien para apartarlos de las ciudades y evitar que con su
presencia empañen la limpieza y el buen orden.
La relatora de las Naciones Unidas sobre los derechos humanos y la
extrema pobreza, señala que, en realidad, ese prejuicio, sólo está
sirviendo para castigar más a los pobres y segregarlos de la sociedad.
En una entrevista con Radio ONU, Magdalena Sepúlveda, comenta algunas de
esas medidas.
- Descargar audio (MP3 - 2.2 MB)
Audio publicado en Más Voces : www.masvoces.org
No hay comentarios:
Publicar un comentario