El violento enfrentamiento entre la policía y
los ocupantes de un predio del departamento jujeño de Ledesma provocó
al menos cuatro muertos –entre ellos, un policía– y una treintena de
heridos, víctimas de balas de plomo, de goma y gases lacrimógenos, según
denunció la Corriente Clasista y Combativa. El gobernador Walter
Barrionuevo separó del cargo al jefe del operativo, comisario Néstor
Vera, dijo “no encontrar explicación” y subrayó que los uniformados
tienen orden de “no llevar armas y solo escudos”. En las tierras de
Ledesma, empresa azucarera de la familia Blaquier, durante la semana del
20 de julio de 1976 se produjo el apagón que permitió secuestrar a 400
personas perseguidas por la dictadura.
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