Bonn, Alemania.- La visita de Estado que realizó el presidente Felipe Calderón a Alemania fue empañada por una serie de manifestaciones en Bonn y en Berlín donde organizaciones de derechos humanos y de apoyo a movimientos sociales protestaron por los hechos de violencia en el estado de Oaxaca, la impunidad y la injusticia que impera en México.
“Calderón no eres bienvenido”, “Ich bin Menschenrecthtlerin Erschiesst Mich! (Soy una defensora de derechos humanos ¡mátame!), “Atenco, Oaxaca, Copala, ya basta”, “No al terrorismo de Estado en México”, “Alto a la guerra sucia en México (Schluss mit dem Schmutzigen kieg in Mexiko)”, son algunas de las consignas que recibieron al presidente de México durante su visita de dos días a este país.
Representantes de organizaciones de Münster, Hamburgo, Colonia, Bonn, Bremmen y Berlin, así como de países como España, Uruguay, Nicaragua y México, participaron en estas protestas.
Antes, la Coordinación Alemana por los Derechos Humanos en México entregó un documento a la Canciller Angela Merkel y al Presidente Horst Köhler para que le pidan una explicación al Presidente Felipe Calderón sobre la “precaria” situación de los derechos humanos en México.
Esta red integrada por Amnistía Internacional, el Centro Franciscano de Desarrollo y Misión, Diaconía, Iniciativa México, Obra Episcopal Misereor, Oficina Ecuménica para la Paz y Justicia, Pan para el Mundo, Pax Christi y Procura Misionera de los Jesuitas, también pidieron que Calderón rinda un informe por el asesinato de dos defensores de derechos humanos cometidos, el pasado 27 de abril, en el estado de Oaxaca.
La entrega de estos documentos se realizó por el atentado contra una misión civil de observación internacional que se dirigía al municipio autónomo de San Juan Copala, en el estado de Oaxaca.
Las cartas firmadas también por organizaciones como Promovio, la Asociación de Apoyo para el Movimiento de Derechos Humanos Indígena de Oaxaca, Promovimiento Indígena en Oaxaca, la Universidad Protestante para Trabajo Social y Diaconía, solicitaron a la Canciller Merkel y al Presidente Köhler “hagan hincapié en la responsabilidad que tiene el gobierno mexicano de garantizar la seguridad de los defensores de derechos humanos, según las normas internacionales”.
Así mismo, hicieron un llamado para que “el Estado mexicano quede emplazado a investigar los acontecimientos de Oaxaca de manera imparcial, expedita y efectiva".
La primera protesta se realizó este domingo en Bonn, precisamente en inmediaciones del Palacio Schaumburg donde Calderón sostuvo una reunión con la canciller Angela Merkel.
Ahí también se manifestaron grupos de ambientalistas de Greenpeace y del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) porque México será sede la próxima cumbre mundial del cambio climático.
Mientras que este lunes, otro grupo de activistas encabezados por el Comité de Solidaridad con los Pueblos en Resistencia en América Latina (Cospral) y la agrupación Carea protestaron contra Calderón en museo Martin-Gropuis-Bau donde se montó una exposición de la pintora Frida Kahlo, la cual será inaugurada formalmente en el mes de junio próximo.
Los inconformes coincidieron en que Felipe Calderón “no es bienvenido” porque el gobierno no respeta los derechos humanos, hay gran impunidad y no se respeta el Estado de derecho en México”, afirmó LutznKerkeling del colectivo Basta, organismo que apoya movimientos libertarios.
Hizo hincapié en que estas protestas son para denunciar, “esa injusticia cotidiana que sufre el pueblo de México y desenmascarar a un gobierno que promueve una cara bonita, limpia, de demócrata y que en la realidad no existe, al contrario, es un gobierno de simulación que genera una violencia de Estado en contra del pueblo organizado, la sociedad civil y los defensores que denuncian las graves violaciones de derechos humanos en ese país”.
Keiko Kiser, de Múnster, calificó de preocupante lo que pasa en México y, todavía más grave que el gobierno sólo actué cuando matan a un extranjero, siendo que casi todos los días muere un mexicano y nunca investigan.
Estamos tristes por lo que ocurrió con el defensor de derechos humanos de Finlandia, Jyri Antero Jaakkola y la mexicana Beatriz Alberta Cariño y es algo por el que tiene que responder el gobierno de Ulises Ruiz Ortiz y de Felipe Calderón.
Mientras que en Berlín, el Comité de solidaridad con los Pueblos en Resistencia en América Latina y el grupo Carea, manifestaron que el “terrorismo de Estado” viene de los policías, militares o paramilitares promovido por caciques locales, gobiernos estatales y del mismo gobierno federal.
fuente, vìa:
http://www.oaxacaenpiedelucha.info/2010/05/repudian-defensores-de-derechos-humanos.html
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